Un hombre que chocó su coche contra más de 100 fanáticos de Liverpool en un desfile de victoria de la Premier League “perdió su temperamento porque quería llegar a donde iba” y “quería causar daño grave a la gente en la multitud”, dijeron en su audiencia de sentencia.
El fiscal Paul Greaney KC dijo al Tribunal de la Corona de Liverpool que Paul Doyle conducía su Ford Galaxy Titanium gris desde su casa en Croxteth al centro de Liverpool para recoger a amigos que fueron al desfile el 26 de mayo. Su vehículo pesaba casi dos toneladas.
El Sr. Greaney dijo que la calle estaba llena de peatones en lo que debía ser un día de alegría.
Él dijo: “El acusado entró con el Galaxy a Dale Street a las 5:54 pm y comenzó a ir en dirección a Water Street, o sea en dirección contraria a la de los fanáticos, y hacia ellos.”
“Desde el principio, Paul Doyle manejó de forma peligrosa en esa calle, asustando a la gente. Luego, a las 5:59 pm, encontró unos medidas de tráfico que desviaban los coches a la derecha.
“Se paró, pero poco después salió por el lado izquierdo de Dale Street hacia Water Street, ignorando las medidas.”
Doyle, de 54 años, lloró cuando apareció en el tribunal para su audiencia.
Llevaba un traje negro y corbata gris con camisa blanca y lloraba cuando el fiscal Paul Greaney KC empezó a hablar.
Doyle tenía un pañuelo en la mano que a veces se ponía en la cara.
Más de 30 víctimas estaban en la corte para la audiencia, con otros en otra sala del edificio.
Las acciones de Doyle “crearon horror en los que asistieron a lo que pensaron sería un día de felicidad”, dijo el fiscal.
Él dijo: “Para las 6:01 pm, o sea menos de dos minutos después, el Galaxy estaba parado en Water Street y los fanáticos intentaban sacar a Paul Doyle del coche. Rápido, los policías lo protegieron, y luego fue arrestado, con solo heridas menores.
“Lo que pasó en ese corto tiempo entre las 5:59 pm y las 6:01 pm es que el acusado chocó su vehículo con mucho más de 100 personas, causando heridas graves a muchos y, cuando el coche se paró, personas incluyendo niños quedaron atrapados abajo.
“El caso de la fiscalía es que el acusado usó el vehículo como un arma durante ese tiempo.
“Al hacerlo, no solo causó heridas a mucha gente, sino también generó horror en los que pensaron que sería un día de alegría.
“La verdad es simple: Paul Doyle perdió su temperamento por su deseo de llegar a donde quería. Con mucha rabia, manejó contra la multitud. Cuando lo hizo, su intención fue causar daño grave a las personas en la multitud.”
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