Un hombre fue torturado y ejecutado en un horroroso ‘secuestro cripto’ en la Costa del Sol.
La Policía ha revelado las aterradoras últimas horas de la víctima, quien fue emboscado en Mijas por una banda al estilo ‘comando’ vestida completamente de negro.
La pesadilla comenzó en abril, cuando la víctima y su pareja fueron acorralados por tres o cuatro figuras encapuchadas con pasamontañas y guantes.
Cuando el hombre intentó huir para salvar su vida, los sicarios abrieron fuego, alcanzándole en una pierna para inmovilizarlo.
?Detenidas 5 personas por el secuestro y asesinato de un hombre para sustraer sus #criptoactivos
??Imputadas otras 4, que se encuentran en territorio #danés
?Asaltaron a una pareja y tras disparar al varón les introdujeron en una vivienda, allí trataron de acceder a sus… pic.twitter.com/3Gs3hOYVtj
— Policía Nacional (@policia) 10 de diciembre de 2025
Sangrando y reducido, fue arrastrado a un vehículo de huida junto a su pareja y conducido a una ‘casa segura’ secreta.
Allí, la pareja permaneció secuestrada durante horas mientras la banda intentaba forzarlos a revelar las contraseñas de sus ‘monederos’ de criptomonedas.
Los investigadores creen que el grupo empleó una violencia extrema durante el interrogatorio.
Cuando la policía allanó posteriormente los escondites de la banda en Madrid y Málaga, descubrieron unos pantalones manchados de sangre y una porra extensible de acero, lo que sugiere que la víctima fue torturada durante su cautiverio.
En un giro escalofriante, los secuestradores decidieron liberar a la mujer, abandonándola en la calle a medianoche.
Su pareja, sin emargo, nunca fue visto con vida de nuevo.
Su cuerpo fue hallado posteriormente abandonado en una zona boscosa de Mijas. La Policía informó de que el cadáver presentaba ‘signos evidentes de violencia’ que iban mucho más allá del inicial balazo en la pierna.
Los detectives han desarticulado la red, la cual mantiene profundos vínculos con Dinamarca.
En total, se ha identificado a nueve sospechosos. Cinco fueron arrestados en España, mientras que cuatro han sido imputados en Dinamarca, dos de los cuales ya se encuentran entre rejas allí.
Durante los registros, los agentes incautaron un arma de fuego real, una pistola réplica y las pruebas que vinculaban a los sospechosos con la sangrienta casa segura.
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