Se avecina el invierno y ello significa que resulta más difícil para los animales abandonados o callejeros encontrar alimento para sobrevivir al frío. Esto lleva a muchas personas a querer ayudar más y dejar comida en la calle, especialmente para los gatos sin hogar.
Si bien alimentar a animales abandonados puede parecer un acto totalmente inofensivo y mucha gente lo hace, en España existen normativas y leyes específicas al respecto que conviene conocer.
No es común ver gatos callejeros en ciertas zonas de España, como sí ocurre en Grecia, especialmente en las grandes urbes. En parte, esto se debe a que la mayoría son mascotas que viven en casas y, por tanto, no pueden salir libremente a reproducirse. No obstante, suele haber más gatos callejeros en regiones como Andalucía, las Islas Baleares y las Islas Canarias.
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Ciudades como Madrid y Barcelona, sin embargo, sí cuentan con colonias de gatos callejeros, aunque no se vean muchos en las calles. En Barcelona, por ejemplo, hay varias colonias en la montaña de Montjuïc, mientras que en Madrid pueden encontrarse muchas en el Parque del Buen Retiro.
Según Sergio García, Director General de Derechos de los Animales, la Ley de Bienestar Animal de España no prohíbe explícitamente alimentar animales en la vía pública.
No obstante, los ayuntamientos sí disponen de ordenanzas que regulan esta cuestión. Por ejemplo, en Madrid, la Ordenanza Reguladora de la Tenencia y Protección de Animales prohíbe alimentar a animales abandonados o callejeros si ello puede generar molestias, daños o condiciones insalubres.
En Barcelona, se permite dar de comer a animales callejeros, siempre y cuando no se genere suciedad en los espacios públicos.
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De acuerdo con la Ley de Bienestar Animal, los ayuntamientos son los responsables de gestionar las colonias felinas en España mediante el método CES (Capturar-Esterilizar-Soltar). Esto permite controlar la población de gatos callejeros y garantizar su bienestar sin causarles daño.
Solo aquellas personas con un permiso o autorización especial pueden alimentar a las colonias de gatos en España, pero siempre es posible ofrecerse como voluntario para hacerlo.
Si estás interesado, deberías contactar con tu ayuntamiento y informarte sobre los programas y grupos que existen en tu zona.
En Barcelona, por ejemplo, puedes unirte al grupo de Facebook Cats Barcelona, donde puedes conectar con otros voluntarios y descubrir cómo ayudar.
En Málaga, existe la Asociación Málaga Felina, a la que puedes contactar; esta asociación ayuda a organizar a voluntarios para cuidar de los gatos callejeros en toda la provincia.
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Si decides alimentar gatos sin autorización, podrías enfrentarte a multas en algunas ciudades si se considera que alteras los protocolos de gestión de las colonias o generas un riesgo para la salud pública. Las sanciones varían en función de la normativa local.
Si ves un gato en malas condiciones o con hambre en las calles de España, lo mejor es que notifiques a las autoridades, a una protectora de animales o a un grupo de voluntarios, para que puedan asesorarte sobre el procedimiento correcto de acuerdo con la normativa local.