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Los automovilistas británicos sorprendidos por exceso de velocidad en Europa, y los conductores europeos sorprendidos en el Reino Unido, podrían recibir pronto una desagradable sorpresa al regresar a casa tras el reciente “acuerdo de reinicio” entre la UE y el Reino Unido.
Desde el Brexit, los automovilistas británicos han evitado multas por infracciones menores de tráfico en Europa porque la documentación no podía ser entregada a direcciones en el Reino Unido. Pero ese raro ‘Beneficio del Brexit’ parece estar a punto de desaparecer más pronto que tarde.
Lo contrario también ha sido cierto, con los conductores europeos que cometen infracciones menores de tráfico en el Reino Unido efectivamente fuera del alcance de las autoridades británicas desde enero de 2021.
Desde que el Reino Unido dejó formalmente la Unión Europea, las fuerzas policiales en Europa no han tenido acceso a la base de datos de registro de vehículos de la Agencia de Licencias de Conducir y Vehículos del Reino Unido, y viceversa.
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Esto ha significado que las autoridades en Europa no han podido rastrear a los automovilistas británicos que cometen infracciones de tráfico mientras están en carreteras europeas, por lo que las multas que normalmente se envían por correo, como por exceso de velocidad o uso del teléfono móvil, no han podido ser enviadas.
Pero, además de los derechos de pesca, los carriles de pasaportes y las propuestas de movilidad juvenil en los titulares, el nuevo acuerdo de reinicio UE-Reino Unido incluye la aceleración de un acuerdo sobre el intercambio de detalles de registro de vehículos entre los estados europeos y el Reino Unido.
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El acuerdo se comprometió a “una implementación más rápida y mejor del Acuerdo de Comercio y Cooperación y a reforzar su cooperación. Esto significa, por ejemplo, finalizar el trabajo para establecer el intercambio de datos de registro de vehículos bajo el Acuerdo.”
Antes de la salida de Gran Bretaña de la UE, la Directiva de Aplicación Transfronteriza, introducida en 2015, permitía a las autoridades de los países de la UE perseguir a los conductores por infracciones de tráfico, siempre y cuando su coche estuviera registrado en un país de la UE.
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