Enclavado en el corazón del Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama, se encuentra El Acebuchal, un “pueblo perdido” bellamente restaurado que fue abandonado tras la Guerra Civil y recuperado con esmero desde finales de los años noventa. El Bar Restaurante El Acebuchal, el único establecimiento del caserío, rezuma un encanto rústico de época con sus muros de piedra, vigas de madera y una acogedora terraza con vistas a las imponentes montañas. En un dia despejado, los comensales se envuelven en un silencio solo interrumpido por el canto de los pájaros, rodeados de casas encaladas y serpenteantes caminos: una atmósfera remota que traslada a otro tiempo, ideal para quienes buscan la auténtica tranquilidad andaluza, lejos de los circuitos habituales.
Una cocina serrana con siglos de tradición
Su carta rinde homenaje a la gastronomía tradicional de la sierra, recuperando recetas de la época de esplendor de la aldea e incorporando versiones de platos más modernos, como gyozas o pan bao. Entre los entrantes figuran ensaladas frescas de temporada, sopas del día y diversas tablas para compartir con opciones vegetarianas. Los platos principales son el auténtico reclamo, con contundentes especialidades como el tierno choto, el conejo, el rabo de toro, la liebre silvestre, el pollo campero o el cerdo, todo elaborado con productos locales tal y como se haría hace un siglo. No hay que perderse el pan recién hecho, que preparan cada mañana en distintas variedades. De postre, se pueden degustar dulces caseros como la tarta de manzana, bizcocho de zanahoria o de chocolate, quesos de la zona o helados artesanales.
La carta de vinos se centra en una cuidada selección regional de productores de Málaga y Andalucía, que marida a la perfección con los sabores robustos de la cocina; su elección se recomienda específicamente en función del plato principal escogido.
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Excelente relación calidad-precio en un entorno excepcional
Los precios son sorprendentemente asequibles para un enclave tan singular: los principales oscilan entre 12 y 18 euros, y una comida completa para dos personas difícilmente supera los 60 euros incluyendo vino, lo que supone una excelente relación calidad-precio.
Para llegar a este rincón apartado, se debe tomar la carretera desde Frigiliana (la ruta más rápida, unos 20 minutos) por un sinuoso camino; el último kilómetro y medio no está asfaltado, pero es transitable para la mayoría de vehículos (no se recomienda con lluvia). Desde Cómpeta el trayecto es algo más largo. Es imprescindible reservar, especialmente los fines de semana; se puede llamar al +34 951 48 08 08 o consultar la web elacebuchal.com para más detalles. Una escapada genuina que merece sin duda el viaje.
