Las fuerzas de seguridad rusas dicen que han detenido a un espía ucraniano acusado de matar a un general ruso en un ataque con bomba en un coche en las afueras de Moscú el viernes. El servicio secreto FSB dijo que habían detenido al “agente de los servicios especiales ucranianos Ignat Kuzi” que había “colocado explosivos en un Volkswagen Golf” para matar al General Yaroslav Moskalik. El General Moskalik había sido el subdirector de la dirección operativa principal del Estado Mayor militar. Murió después de pasar junto al coche estacionado frente a su casa en el suburbio de Balashikha. El FSB dijo que Kuzin había armado el coche con un artefacto explosivo casero y que la bomba había sido activada a distancia desde Ucrania. Ucrania no ha comentado sobre el atentado. El FSB dijo que el sospechoso había sido reclutado por Ucrania en 2023, y que había conducido a Moscú en septiembre de ese año. Los medios rusos también informaron que el FSB había publicado un video mostrando al hombre detenido dando una aparente confesión, así como imágenes de su arresto y de los componentes de la bomba. El Kremlin culpó a Ucrania por el ataque, diciendo que Kyiv “continúa su participación en actividades terroristas dentro de nuestro país”. El General Moskalik había representado a Rusia en las conversaciones con Ucrania en París en 2015, que resultaron en los fallidos acuerdos de Minsk que tenían como objetivo poner fin a los enfrentamientos en la región de Donbás entre Ucrania y las fuerzas separatistas respaldadas por Rusia que comenzaron en 2014. Rusia lanzó una invasión a gran escala de Ucrania en febrero de 2022.
