La devastada novia del propietario de un restuarante sueco, quien falleció tras ser arrastrado durante un brutal asalto, se enfrenta ahora a la desesperada tarea de recaudar fondos para cubrir los salarios de sus empleados.
Christian Pikulak, de 30 años, falleció el lunes tras ser arrastrado varios metros bajo un vehículo cuando unos ladrones le arrebataron el teléfono móvil en el centro de Torrevieja, el pasado 3 de octubre.
Su afligida pareja, Vivienne Fondo, afronta ahora la dolorosa labor de repatriar sus restos a Suecia, al tiempo que debe garantizar el pago a los empleados de su restaurante Smashed Burger y saldar las crecientes deudas del negocio.
“Mi querido novio, Christian Pikulak, fue víctima de un cruel robo en el centro de Torrevieja”, relató en un emotivo llamamiento en redes sociales. “Fue arrastrado varios metros por un coche cuando los autores le sustrajeron el móvil, y su vida no pudo salvarse.”
La tragedia ocurrió alrededor de las 4:00 a.m. en la calle Pedro Lorca, cuando Christian y Vivienne fueron abordados por un grupo de jóvenes en un vehículo que solicitaban direcciones.
Cuando el empresario sueco sacó su teléfono para auxiliarles, uno de los ocupantes se lo arrancó de las manos. Al ofrecer resistencia, Christian fue arrastrado varios metros por la calle por el vehículo que huía, mientras su novia presenciaba la escena horrorizada.
Permaneció varios días luchando por su vida en coma en el Hospital de Elche, hasta su fallecimiento el 7 de octubre.
Vivienne se encuentra ahora en España con la madre de Christian, agobiada por la carga económica que supone repatriarlo, pagar a la plantilla del restaurante y afrontar los costes legales de una investigación que la policía trata como homicidio.
“Los costes de transporte y toda la tramitación administrativa superan con creces lo que podemos asumir”, explicó. “Desafortunadamente, el seguro no cubre nada.”
Los fondos se requieren con urgencia para repatriar el cuerpo de Christian a Suecia para un funeral digno, pagar los salarios pendientes, liquidar facturas del negocio y cubrir los crecientes honorarios legales.
Christian residía en la Costa Blanca desde hacía tres años, donde construyó su negocio y consolidó el popular Smashed Burger. Vivienne lo describió como “un hombre lleno de vida, sueños y amor por su familia, amigos y su trabajo.”
La Policía Judicial investiga los hechos como un homicidio, tras rastrear la señal del iPhone robado hasta la ciudad de Alicante.
Se puede colaborar con donativos a través de Swish (aplicación de pago sueca) al número: 0709356427