El exalcalde de Nueva York, Rudy Giuliani, recibirá la Medalla Presidencial de la Libertad, el honor civil más alto, según anunció Donald Trump en Truth Social.
Giuliani se hizo conocido como el “Alcalde de América” después de liderar Nueva York durante el 11 de septiembre. Aunque antes trabajó como abogado personal de Trump, desde entonces se separaron.
El anuncio llega dos días después de que Giuliani sufriera heridas en la espalda cuando el coche en el que viajaba fue chocado por detrás, según la policía.
Las Medallas Presidenciales de la Libertad se otorgan a personas que han hecho contribuciones excepcionales a la prosperidad, valores o seguridad de la nación, la paz mundial u otros esfuerzos significativos.
En la publicación donde Trump anunció la nominación, lo llamó “el mejor alcalde en la historia de Nueva York y un igualmente gran patriota estadounidense”.
Entre los galardonados pasados están Muhammad Ali, la Dra. Jane Goodell, Anna Wintour y Michael J. Fox, entre muchos otros.
En 2017, el expresidente Barack Obama otorgó la Medalla de la Libertad al entonces vicepresidente Joe Biden.
Giuliani aún no ha comentado públicamente sobre el anuncio y no está claro cuándo recibirá formalmente la medalla.
El sábado por la noche, un automóvil en el que viajaba fue golpeado por detrás en el estado de New Hampshire.
Todos los involucrados sufrieron heridas no mortales y fueron llevados al hospital, dijo la policía. Su guardaespaldas dijo que sufrió heridas en la espalda, además de cortes y moretones. Según reportes, Giuliani ya salió del hospital.
La respuesta de Giuliani al atentado del 11 de septiembre en Nueva York recibió grandes elogios. La revista Time lo nombró Persona del Año en 2001, y la Reina Isabel II le otorgó un título de caballero honorífico.
En 2008, se postuló sin éxito para presidente de EE. UU., y luego se convirtió en uno de los asesores de Trump durante su campaña de 2016.
Aunque Giuliani tuvo un ascenso histórico a la fama, en los últimos años ha tenido problemas personales y financieros.
Se unió al equipo legal de Trump en 2018 y permaneció en él hasta las elecciones de 2020.
Fue uno de los aliados de Trump que difundió afirmaciones falsas de fraude electoral en un esfuerzo por revertir la derrota de Trump ante Joe Biden en 2020.
Giuliani fue demandado por difamación y obligado a pagar 148 millones de dólares a dos ex trabajadores electorales de Georgia.
Ese fallo también lo forzó a declararse en bancarrota y llevó a que le quitaran su licencia para ejercer la abogacía.
A principios de 2021, terminó su trabajo legal con Trump, aunque un asesor dijo que siguieron siendo aliados y amigos.