Kanye se mantuvo ocupado montando un estudio de grabación improvisado en su villa. Crédito: Tinseltown. Shutterstock
Kanye West y Bianca Censori se encuentran actualmente en Mallorca, embarcándose en un capítulo bastante único de retiro y aventuras extravagantes. Según el periódico alemán Bild, la pareja se hospeda en The Balance RehabClinic, un exclusivo centro de bienestar que ofrece programas de desintoxicación y salud mental totalmente personalizados.
Este retiro ultra privado, que opera bajo el lema “un cliente a la vez”, combina terapias de vanguardia como la neuroretroalimentación y la estimulación cerebral con métodos más tradicionales como el yoga, los masajes y paseos conscientes. Los huéspedes son alojados en villas privadas o incluso yates de lujo, asegurando una completa discreción. Con un precio de alrededor de €150,000 por semana, su retiro podría totalizar una asombrosa cantidad de €600,000 durante las cuatro semanas planeadas.
En los primeros días, Kanye apoyó a Bianca a través de un tratamiento ambulatorio en la vanguardista Casa Neuendorf, antes de que ella regresara al centro de rehabilitación. Mientras tanto, Kanye se mantuvo ocupado montando un estudio de grabación improvisado en su villa, desde el cual su amigo y productor Digital Nas transmitió en vivo en Twitch.
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Los espectadores pudieron ver a un West tranquilo y sereno, a veces aferrando una Biblia, mientras entraba y salía del estudio. Durante la transmisión en vivo, el rapero insinuó que la pareja estaba “en retiro” en Mallorca y reveló que Censori continuaría sus sesiones en el centro.
La pareja ciertamente no ha pasado desapercibida en la isla. El pasado sábado, causaron revuelo en Palma cuando entraron en Equis Erotic Store, una conocida tienda de artículos eróticos en La Rambla. Allí, compraron casi veinte artículos, incluyendo trajes excéntricos, cascos futuristas, accesorios de cuero e incluso un osito de peluche sadomasoquista, aunque curiosamente, sin juguetes sexuales.
La tienda tuvo que ser cerrada y la calle acordonada para dar cabida a su visita, dejando a los transeúntes atrapados entre el shock y las ganas de capturar el espectáculo en sus teléfonos. Después de su derroche, la pareja se dirigió a otra sucursal de la misma cadena cerca de Porta de Sant Antoni, ampliando aún más su colección bastante curiosa.
Su estancia en la isla ha estado salpicada de otras salidas públicas también. La semana anterior, fueron vistos cenando en un restaurante indio en Santanyí, disfrutando de platos como pollo madrás y mango lassi, antes de dar un paseo por Cala d’Or con el productor 88-Keys.
Su llegada en jet privado y su estancia anterior en un agroturismo de lujo también avivaron los rumores de una reconciliación, tras meses de especulaciones sobre su relación.
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