El Presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y su homólogo británico, Keir Starmer, mantubieron un encuentro esta semana en Londres y acordaron colaborar para proteger los derechos de sus ciudadanos en ambos países, incluso de aquellos no amparados por el Acuerdo de Retirada del Brexit.
Un comunicado del gobierno británico emitido tras la reunión señalaba: “Fomentaremos iniciativas que reconozcan públicamente el rol y la contribución de la comunidad española en el Reino Unido y de la comunidad británica en España.”
“Reafirmamos nuestro compromiso de continuar trabajando estrechamente para proteger los derechos de los ciudadanos y abordar las cuestiones que afectan a todos los nacionales españoles en el Reino Unido y a los británicos en España, tanto a los cubiertos por el Acuerdo de Retirada como a los que no, incluyendo materia de seguridad social (teniendo en cuenta que el ACM describe los beneficios de seguridad social y atención sanitaria para aquellos fuera del ámbito del Acuerdo de Retirada). También nos comprometemos a mantener discusiones a nivel técnico para explorar cuestiones específicas.”
Tanto el Reino Unido como España subrayaron que estas conversaciones representan el alba de una nueva era en las relaciones hispano-británicas.
Asimismo, algunos abrigan la esperanza de que esta mejora en las relaciones pueda poner fin a la norma de los 90 días, que solo permite a los ciudadanos británicos permanecer en España 180 días en dos periodos de 90 días.
