El Ayuntamiento de Marbella se ha comprometido a intervenir en un controvertido proceso de despido colectivo que amenaza los puestos de trabajo de alrededor de 100 empleados del Hotel Senator Marbella, dado que el operador actual planea rescindir los contratos a partir del 8 de noviembre.
En un comunicado posterior a una reunión con responsables municipales, el sindicato CCOO anunció que el consistorio está «dispuesto a mediar en esta situación, tanto con el actual gestor del hotel como con la propietaria del inmueble, con el fin de hallar una solución que garantice el manteminiento de estos empleos».
La plantilla, representada por CCOO y el comité de empresa, tiene previsto impulsar una serie de reuniones ya calendarizadas con diversos organismos e instituciones. Su objetivo es paralizar el procedimiento de extinción de contratos (ERE) antes de que tenga lugar la primera sesión de negociación, fijada para el 9 de octubre. «No vamos a aceptar un ERE fraudulento y exigimos la subrogación inmediata a Santa Lucía o al nuevo operador (Meliá)», advirtió el sindicato.
Lo Más Leído en Euro Weekly News
La polémica surge a raíz del anuncio de Hoteles Playa, el grupo gestor actual, que ha iniciado un expediente de regulación de empleo que afecta a aproximadamente 90 trabajadores. La empresa alega como justificación la caducidad de su arrendamiento con la propietaria Santa Lucía y las inminentes obras de reforma. Una vez finalizadas estas, está previsto que la cadena de lujo Meliá Hotels International se haga cargo del establecimiento.
Los despidos en el Hotel Senator son «inaceptables», afirma el sindicato
Los representantes sindicales han rechazado enérgicamente los despidos, arguyendo que la continuidad del hotel obliga al nuevo operador a asumir a la plantilla. «Rechazamos categóricamente el despido de los trabajadores y la extinción de sus puestos de trabajo porque el hotel no cierra», declaró Alejandro Bueno, delegado de CCOO en el hotel. Invocó el artículo 44 del Estatuto de los Trabajadores y el convenio colectivo de hospedaje de Málaga, que estipulan la subrogación laboral en la traspaso de una unidad productiva, un principio reiteradamente avalado por el Tribunal Supremo.
Esta resistencia se produce en un momento especialmente significativo para la región. La provincia de Málaga está viviendo su año turístico más exitoso hasta la fecha, con unos beneficios hoteleros en Marbella que han aumentado más de un 22 por ciento. «Este ataque resulta aún más inaceptable en medio de tal prosperidad», añadió Bueno. «No permitiremos que a nadie se le deje en la calle durante una bonanza económica por un mero cambio de gestión. El hotel permanece abierto, la actividad continúa y la subrogación no es un favor; es un derecho reconocido».
A medida que se aproximan las negociaciones, la lucha de los trabajadores pone de relieve las tensiones subyacentes en la pujante industria hostelera española, donde los rápidos cambios corporativos suelen colisionar con las protecciones laborales. Los responsables municipales aún no han detallado las particularidades de su mediación, pero la implicación del gobierno local suscita una esperanza plausible de evitar los despidos.