Londres, Reino Unido – Cientos de líderes empresariales en el Reino Unido, entre ellos un exasesor del rey y un consultor de sostenibilidad descendientes de supervivientes del Holocausto, instan al gobierno a que adopte medidas contra Israel mientras la crisis en Gaza se intensifica.
Hasta la mañana del jueves, 762 personas habían rubricado una declaración que exige al Reino Unido que cesé todo comercio de armas con Israel, sancione a los acusados de violar el derecho internacional —incluso al Primer Ministro Benjamin Netanyahu, contra quien el Tribunal Penal Internacional emitió una orden de arresto—, invierta en evaluar y detener la complicidad de empresas británicas, y haga cumplir los principios de derechos humanos de Naciones Unidas en los sistemas económicos del país.
“No solo lo vemos como un imperativo moral, sino como una cuestión de responsabilidad profesional, consecuente con nuestro deber de actuar en pro del interés superior de la resiliencia social y económica a largo plazo”, señala la carta. “El Reino Unido debe asegurarse de que ningún negocio, ya sea mediante productos, servicios o cadenas de suministro, contribuya directa o indirectamente a estas atrocidades”.
Entre los firmantes figuran el exasesor real Jonathon Porritt CBE; el consultor de sostenibilidad Adam Garfunkel; Frieda Gormley, fundadora de la marca de diseño de interiores House of Hackney; el destacado filántropo y exdirectivo de Unilever, Paul Polman; y Geetie Singh-Watson MBE, empresaria del sector de alimentos orgánicos, así como otros profesionales condecorados con la distinción de Miembro del Imperio Británico (MBE).
Se han comprometido a apoyar al gobierno británico mediante un “proceso continuo de evaluación y actuación: revisar nuestras operaciones, cadenas de suministro, flujos financieros e influencia para contribuir a fomentar la paz, defender los derechos humanos y proteger el respeto al derecho internacional”.
“El negocio no puede prosperar en sociedades que se desintegran”, afirmó Polman. “Es hora de que los líderes empresariales demuestren coraje, alcen la voz y utilicen su influencia para defender el derecho internacional”.
El número de profesionales que suscriben la carta aumenta mientras los palestinos en la Franja de Gaza enfrentan sus días más oscuros. Israel ha iniciado una temida invasión contra la ciudad de Gaza, en tanto miles de personas padecen enfermedades y hambruna debido al bloqueo de la Franja.
(Cortesía de Adam Garfunkel)
“Como empresas, debemos dar testimonio de nuestra existencia y asegurar que todas las personas, en todo lugar, merezcan un trato equitativo”, declaró Garfunkel a Al Jazeera. “Mi familia quedó atrapada en el Holocausto. Mi padre tuvo la fortuna de escapar junto a su hermano y sus padres al Reino Unido. Mis bisabuelos fueron llevados al bosque, fusilados y enterrados en una fosa común, y lo que he aprendido de ello es una firme convicción de que cada vida importa, de que todos tienen derechos humanos, y de que la persecución por identidad étnica siempre estará mal, dondequiera que ocurra”.
La última ofensiva de Israel contra Gaza, calificada de exterminio por principales grupos de derechos humanos, ha segado la vida de más de 60.000 personas en los 22 meses transcurridos desde el 7 de octubre de 2023, cuando Hamás llevó a cabo una incursión en el sur de Israel en la que murieron aproximadamente 1.200 personas y se tomaron 250 rehenes, “crímenes graves según el derecho internacional”, según la carta.
“Sin embargo, la campaña militar en curso del gobierno israelí equivale a un asalto implacable e indefendible contra civiles, que vulnera tanto los límites morales como los principios fundamentales de los Convenios de Ginebra”, añade.
Porritt, quien asesoró al Rey Carlos en materia medioambiental durante tres décadas —cuando el monarca aún ostentaba el título de Príncipe de Gales— y presidió una Comisión de Desarrollo Sostenible establecida por el ex primer ministro Tony Blair, señaló que la carta refleja el papel de las empresas en la sociedad en un momento crítico.
“En el transcurso de los últimos meses se ha vuelto palpablemente evidente que esta situación es ahora completamente intolerable. Y constituye, muy específicamente, un exterminio contra el pueblo palestino, contra Gaza”, dijo a Al Jazeera.
Las empresas tienen la obligación de apoyar la “protección y preservación” de los derechos humanos en los países donde operan, afirmó. “Esto ofrece una guía muy sólida sobre por qué los líderes empresariales individuales deben implicarse en este momento”.
Porritt ha acaparado recientemente la atención de los medios británicos por su apoyo a Palestine Action, un grupo de protesta prohibido hace semanas por el gobierno del Reino Unido bajo la acusación de organización terrorista.
Fue uno de los más de 500 ciudadanos arrestados durante una manifestación el 9 de agosto en Londres, donde portaba una pancarta que decía: “Me opongo al exterminio, apoyo la acción palestina”.
Su vista para la apelación de fianza está prevista para finales de octubre.
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