La canciller Rachel Reeves ha sufrido otro revés presupuestario con una rebelión de diputados laboristas rurales contra el impuesto de sucesiones para agricultores.
Durante el último día del debate presupuestario en la Cámara de los Comunes, los diputados de base laborista exigieron un cambio radical en las polémicas propuestas.
Los planes para introducir un impuesto del 20% a las explotaciones agrarias valoradas en más de un millón de libras a partir de abril han llevado a decenas de miles de manifestantes a Londres. Muchos temen facturas fiscales enormes que forzarían a las pequeñas granjas a venderse para siempre.
La votación sobre la llamada “tasa a las granjas familiares” se realizó pasadas las 8 de la tarde del martes. Decenas de diputados laboristas parecieron abstenerse, y un diputado de base – Markus Campbell-Savours, de la circunscripción fronteriza – votó en contra, junto a los conservadores.
En esta votación, la quinta de siete al final del debate, el apoyo al Partido Laborista cayó de 371 votos en la primera votación sobre cambios fiscales a 327, un descenso de 44 votos.
Esta mini-rebelión siguió a un llamamiento del Sindicato Nacional de Agricultores (NFU) a los diputados laboristas para que se abstuvieran. “A los diputados laboristas: Les pedimos que se abstengan en la Resolución Presupuestaria 50”, urgía el NFU.
Tras la votación, el presidente del NFU, Tom Bradshaw, declaró: “Los diputados que han mostrado su apoyo son los representantes rurales del Partido Laborista. Representan a los trabajadores del campo y han hablado en nombre de sus electores”.
El gobierno ganó la votación cómodamente por 327 a 182, una mayoría de 145. Pero la mini-rebelión sirvió de advertencia a la canciller y a Sir Keir Starmer de que los nuevos diputados laboristas de zonas rurales están dispuestos a rebelarse.
Hablando en el debate, Campbell-Savours dijo: “Siguen existiendo hondas preocupaciones sobre los cambios propuestos a la Desgravación por Propiedad Agraria (APR). Unos cambios que dejan a muchos, no menos a agricultores mayores, devastados por el impacto en sus granjas familiares”.
Samantha Niblett, diputada laborista por South Derbyshire, se abstuvo tras decir: “Le suplico al gobierno que reconsidere el impuesto de sucesiones sobre la APR. La mayoría de los agricultores no son terratenientes ricos, viven al día con márgenes de beneficio minúsculos o inexistentes”.
Entre los diputados laboristas de circunscripciones rurales que no votaron figuran Tonia Antoniazzi, Julia Buckley, Torquil Crichton, Jonathan Davies, Maya Ellis, Anna Gelderd, Ben Goldsborough, Alison Hume, Terry Jermy, Jayne Kirkham, Noah Law, Perran Moon, Samantha Niblett, Jenny Riddell-Carpenter, Henry Tufnell, John Whitby y Steve Witherden.
