Reacciones apasionadas de los seguidores ante la incursión de la estrella de ‘The Summer I Turned Pretty’ en una serie de erótico auditivo

Pasó menos de 24 horas después del final de The Summer I Turned Pretty para que el actor Chris Briney revelara su próximo proyecto. Pronto quedó claro que sus fans no saldrían decepcionados.

“Si él no cuidó bien de tu corazón, apuesto a que tampoco cuidó bien de tu cuerpo, ¿verdad?”, dijo el actor en un reel de Instagram, mirando a la cámara dentro de una camioneta. Luego, la escena cambia a Briney con unos audífonos rosados gigantes y hablando a un micrófono, añadiendo: “Mereces ser amada… Y completamente arruinada”.

La reacción de los fans al anuncio de que Briney narraría una serie en la plataforma de erotismo Quinn fue intensísima. Los comentarios iban desde: “¿Merezco ser QUÉ?” y: “Dios mío, Jesús ayúdame”, hasta lo más raro: “VOY A MORDER LA PARED”, que, según expertos, es un “dialecto de excitación” para decir: por favor, continúa.

Pero además de ser un gran golpe para una plataforma que lanzó su app en 2021, el movimiento de Briney confirma que el erotismo se está volviendo mainstream y destapa un apetito insaciable por el romance y la ficción “picante”.

El año pasado, las ventas de libros de “romance y sagas” batieron récords, mientras que en junio abrió la primera librería exclusiva de romance en Inglaterra, en Notting Hill, Londres. En el ámbito auditivo, los ingresos de Quinn se han duplicado desde febrero y sus suscriptores han crecido un 168% en 12 meses, según su CEO Caroline Spiegel. Ella argumenta que está ocurriendo un “cambio cultural” impulsado por mujeres.

“Nuestro contenido está hecho para ellas, pensando en ellas, con ellas como la prioridad y cliente principal”, dice. “El entretenimiento para adultos no ha priorizado históricamente los gustos de las mujeres, principalmente porque lo hacían hombres para hombres”.

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Pero el erotismo auditivo no solo cuenta las historias que las mujeres quieren oír, sino que juega con el formato narrativo para ponerlas en el centro de sus propias fantasías, explica la escritora Holly June Smith, autora de Hidden Harbor, narrada por Briney. En vez de diálogo tradicional, el narrador habla directamente al oyente en una experiencia “inmersiva”.

“Quizás la historia es que tuviste un día duro en el trabajo, llegas a casa con tu marido y él va a cuidarte, decirte lo increíble que eres y luego hacer el amor”, dice. “El enfoque eres tú. Cierras los ojos y lo imaginas. Mis comentarios favoritos son cuando la gente dice que le han contestado en voz alta al narrador con los audífonos puestos en el supermercado”.

El género aún está en pañales, pero los creadores en Quinn –que ganan dinero por reproducciones y propinas– ya atraen fans muy leales. Un encuentro virtual reciente de los creadores John York y AJ reunió a unos 100 amantes del erotismo. “Es una comunidad muy acogedora y cálida”, dice York. “La gente da opiniones y críticas útiles. Realmente no se parece a nada, a ningún espacio online que haya visto”.

Aunque el contenido está dirigido a mujeres –el 83% de los suscriptores de Quinn–, cerca de tres cuartas partes de los creadores son hombres. Uno de ellos es Ryan Mairs, quien llegó al género de manera poco convencional.

Hace poco más de dos años, este joven de 29 años de Kent trabajaba en reclutamiento y hacía sketches cómicos en TikTok sobre salud mental. Entonces, seguidores con buen oído notaron su voz y empezaron a hacer peticiones muy específicas. “Eran del tipo: ‘Di esto, di aquello’ –hubo comentarios bastante atrevidos, la verdad”, cuenta. “Fue, y sigue siendo, toda una experiencia”.

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Decidido a intentarlo, Mairs grabó un video simplemente diciendo “buena chica”. Se armó un pandemonio: el video tuvo un millón de visitas y sus notificaciones explotaron. “Fue como: ‘Oh, mierda’, pero fue divertido”, ríe. “Me mostró que, vaya, hay oportunidad para hacer carrera, hay una necesidad en la comunidad”.

Aunque no hay duda de que el erotismo auditivo es “picante”, es muy diferente al porno tradicional, argumenta Spiegel. “El porno se ha asociado con contenido gráfico en tube sites, prácticas explotadoras, representaciones irreales de personas y sexo, falta de inclusión, fetichización y normalización de la violencia sexual”, dice. “El erotismo auditivo es actuación, se basa en el consentimiento y deja espacio a tu imaginación”.

El consentimiento es clave en el género, y no solo porque plataformas como Quinn lo exigen en todas las historias. De hecho, a los oyentes les parece excitante, dice Smith. “En Hidden Harbor, el personaje de Chris, River, pregunta: ‘¿Puedo besarte?’”, comenta. “Y la gente se volvía loca porque decían: ‘Dios mío, eso es lo más excitante del mundo’”.