Tras una semana en la que el Ministerio de Asuntos Exteriores británico desaconsejó viajar a Israel – ¿No es genial ver que los británicos tienen a esta gente velando por ellos? –, el director deportivo del Real Mallorca, Pablo Ortells, estuvo en Eslovaquia observando a España en el Europeo Sub-21. También se reunió con los representantes de nuestro portero estrella, Dominik Greif, para mejorar su contrato y retenerlo ante las ofertas del mercado. El Mallorca ha mejorado sustancialmente la propuesta, pero, como era de esperar, aún está por debajo del salario que Rajkovic cobraba antes de irse a Arabia Saudí. La incertidumbre sobre Greif ha despertado el interés de varios equipos de LaLiga, como Betis y Valencia, además de clubes extranjeros. Ortells conoce bien la situación y no quiere que esto se alargue hasta el cierre del mercado, el 1 de septiembre a las 19:00.
El martes por la noche, los medios locales se hicieron eco de la posible disponibilidad del extremo congoleño de 27 años (criado en Londres) Grady Diangana, cuyo contrato con el West Bromwich Albion está por expirar. De nuevo, varios clubes están interesados, incluido el Valencia. El gran problema para el Mallorca es que el actual técnico valencianista, Carlos Corberán, fue entrenador del West Brom, por lo que Diangana conoce sus métodos a la perfección.
Los jugadores de Arrasate tienen menos de tres semanas para volver a los entrenamientos. Entre el 7 y el 9 de julio, se realizarán los reconocimientos médicos en los hospitales Juaneda. El 10 arranca la pretemporada en Son Bibiloni hasta el día 26. El primer amistoso será el 23 de julio (rival por confirmar) antes de viajar a Austria el 26. Allí disputarán tres partidos de preparación: 27, 30 y 31 de julio, día de su regreso a Palma.
Ya en casa, los jugadores terminarán la pretemporada con otro amistoso, probablemente la prestigiosa Copa de la Patata contra el Poblense en Sa Pobla el 6 de agosto. El histórico Trofeo Ciudad de Palma (rival por definir) se jugará el 9, y la Liga arrancará el fin de semana del 16/17 de agosto.
Santi Cazorla, un “chico con un sueño” de 40 años
La batalla por el último ascenso a LaLiga se decidirá mañana (sábado 21 a las 21:00) en el Carlos Tartiere de Oviedo. Tras el ascenso directo de Levante y Elche, Oviedo (entrenado por el exmallorquinista Paunovic) y el Mirandés (Burgos) se medirán en la final. El Mirandés gano 1-0 en la ida, así que todo está por jugar. Si gana Oviedo, volvería a Primera tras 23 años; el Mirandés nunca ha estado en la élite.
Si hay empate tras la prórroga, no habrá penaltis: ascenderá el equipo mejor clasificado en liga. Para Santi Cazorla, este partido es especial. Nacido cerca de Oviedo (su club de toda la vida), es un milagro que (campeón de Europa dos veces) pueda incluso caminar. Pasó seis años en el Arsenal, donde se convirtió en leyenda antes de irse en 2018. Sus últimos dos años los arrastró una grave lesión de Aquiles que requirió 12 operaciones. En una de ellas, contrajo gangrena y los médicos temieron lo peor: “Debería conformarse con volver a caminar”.
Santi lleva medio tatuaje en el brazo; la otra mitad está en su tobillo, de donde se transplantó piel. El nombre de su hija, India, aparece partido, un recordatorio constante de la lesión que casi acaba con su carrera. Ha logrado una recuperación asombrosa y declaró: “Seguiré jugando mientras mi tobillo aguante. Ojalá vuelva a LaLiga, pero lo importante es que mi Oviedo regrese a donde merece”.
Y PARA TERMINAR…
Esta historia ya la conté, pero como la mencionaron en TalkSport, la rescato. Es verídica, según el exárbitro Howard Webb, ahora jefe del VAR en Inglaterra: “En un partido entre Middlesbrough y Chievo Verona (agosto 2006), un italiano no paraba de faltar. En la segunda mitad, le dije: ‘Otra así y roja’. Él respondió: ‘No inglese’. Pedí ayuda al brasileño Rochemback, que supuestamente tradujo. En vez de eso, le gritó al italiano con acento inventado: ‘¡Eh tú, otra foul y tarjeta roja!’. Parecía una parodia de Joe Dolce”.