Vladimir Putin. Crédito: photoibo / Shutterstock
Francia y Rusia intercambiaron hoy, 27 de noviembre, mensajes contundentes sobre la seguridad europea.
Desde Biskek, Vladimir Putin declaró que Rusia «no tiene planes de atacar Europa» y está dispuesta a formalizar dicho compromiso por escrito, si bien insistió en que las tropas ucranianas deben retirarse de todos los territorios reclamados por Rusia antes de que se pueda acordar ningún alto el fuego.
Por su parte, el presidente francés Emmanuel Macron anunció un nuevo servicio militar voluntario de 10 meses para jóvenes de 18 a 19 años. Aunque en un principio muchos titulares lo calificaron de «conscripción», informes de AP y Reuters confirman que no será obligatorio y dará comienzo en el verano de 2026.
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Lo que realmente dijo Putin sobre Europa
Putin afirmó a los periodistas que un borrador de plan de paz para Ucrania respaldado por Estados Unidos «en líneas generales… puede servir de base para futuros acuerdos», al mismo tiempo que subrayó que Rusia «lograría» sus objetivos por la vía militar si las fuerzas ucranianas no se retiran.
Añadió que, si los gobiernos europeos deseaban garantías formales, Rusia estaba preparada para declarar por escrito que no tiene intención alguna de atacar a ningún país europeo.
Estas declaraciones reflejan anteriores intervenciones de oficiales rusos, como el ministro de Asuntos Exteriores Serguéi Lavrov, quien aseguró en septiembre ante la ONU que Rusia «no planea atacar Europa», pero respondería «con contundencia» ante cualquier agresión.
Por qué Europa reconsidera el servicio nacional
Francia no es la única. Varios países, como Lituania, Letonia, Suecia y Dinamarca, han reintroducido o ampliado modalidades de servicio nacional desde la invasión rusa de Ucrania en 2022.
¿Es probable un ataque ruso contra Europa?
El servicio de inteligencia alemán advirtió el año pasado que Rusia podría recuperar la capacidad de amenazar a un miembro de la OTAN para 2029.
Resulta crucial subrayar que los expertos insisten en que se trata de un escenario de preparación para el peor caso, no de una evidencia de que se espere un ataque.
El rápido incremento de los presupuestos de defensa europeos, el aumento de la producción de munición y una coordinación más sólida dentro de la OTAN tienen, según los informes, el objectivo de disuadir un conflicto, no de señalar una guerra inminente.
La política de defensa europea está cambiando, pero la vida cotidiana para los expatriados se mantiene estable. Mantenerse informado aporta claridad sin necesidad de alarmarse.
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