Mallorca evitará la ola de calor que afecta a la península este fin de semana, aunque se esperan máximas de hasta 38ºC en la isla.
María José Guerrero, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Baleares, aclaró que la isla no sufrirá el impacto de la masa de aire cálido procedente del norte de África, la cual se concentra sobre el territorio peninsular.
Para que se declare oficialmente una ola de calor, las temperaturas deben superar los 36ºC durante al menos tres días consecutivos en una zona amplia. Aunque algunas áreas del interior mallorquín cumplirán estos requisitos, la extensión afectada no es suficiente para catalogarlo como tal.
Según Guerrero, el sábado 28 de junio se activará la alerta amarilla en el interior por máximas entre 31ºC y 37ºC, con cielos despejados y vientos ligeros variables, además de las típicas brisas costeras.
El domingo 29, el termómetro subirá aún más, alcanzando 32ºC–38ºC (muy por encima del promedio estacional de 28,5ºC). Persistirá el sol, con rachas de viento suave y brisas litorales.
El lunes cerrará junio sin cambios: calor intenso (31ºC–37ºC), cielos limpios y brisas costeras.