El Ajuntament d’Esporles aprobó el viernes un decreto municipal que establece la prohibición total del uso de agua potable de la red municipal en varios supuestos, como el riego, las piscinas o la limpieza de ambitos privados, en respuesta a la “situación excepcional de falta de precipitaciones” y al incremento del consumo que afecta al municipio.
Desde el mes de abril, la institución ha venido realizando campañas de concienciación pública sobre la necesidad de reducir el consumo, pero “en los últimos días, las reservas en los puntos de captación han disminuido”, segun figura en un comunicado de prensa del consistorio.
Entre los usos que se verán afectados se encuentran el riego de jardines, huertos, árboles y zonas verdes y deportivas privadas (excepto cuando se utilice agua regenerada); la limpieza de viales privados, terrazas, patios o ámbitos similares, salvo que se emplee agua reutilizada; el llenado o renovación del agua de piscinas particulares; y cualquier otro uso ornamental, lúdico o recreativo del agua.
Estas restricciones, que hasta ahora regían únicamente en las urbanizaciones de Rotgetes y Jardín de Flores, afectan ya a la totalidad del término municipal. El Ayuntamiento ha advertido de que estas medidas se mantendrán “hasta nuevo aviso” y podrán ser prorrogadas “en función de la evolución de las reservas hídricas, estableciéndose cortes temporales en el suministro si fuera necesario”.
El Consistorio ha recordado además que el incumplimiento de estas restricciones está tipificado en las Ordenanzas Municipales de Suministro de Agua. Asimismo, ha hecho un llamamiento a la colaboración ciudadana para “preservar un recurso escencial y garantizar el abastecimiento básico para todos”.
