La señora Eley, quien ha pasado cinco décadas formando a mentes jóvenes, fue homenajeada por la Forest Preparatory School con un tributo especial.
La escuela ha renombrado su salón principal como “Eley Hall” en reconocimiento a su larga trayectoria y su impacto en generaciones de estudiantes.
La señora Eley con su clase (Imagen: Suministrada)
Ella comentó: “Yo quería trabajar con niños, ya que no podía tener hijos propios.
“Me encanta estar con los niños, y la enseñanza es lo único que siempre he querido hacer.
“Cada clase que enseño es diferente, y siempre tengo que inventar nuevas formas de enfocar las lecciones y usar estrategias distintas.
“Eso lo mantiene fresco y emocionante.”
La señora Eley comenzó su carrera en colegios internados para niños antes de unirse a Forest Preparatory School.
Recuerda el contraste claramente: “Empecé en internados de niños, así que cuando llegué a Forest me pareció extraño que la gente se fuera a casa a las 4 en punto.
“Incluso recuerdo mi entrevista para el trabajo en Forest. Tomé el té en el jardín con el Director.
“Todavía tengo la lista de mi primera clase y puedo recordar todos sus nombres.”
A lo largo de su carrera, la señora Eley ha visto grandes cambios en la educación, especialmente en cómo los alumnos se involucran en su aprendizaje.
Dijo: “Las tendencias educativas a menudo son cíclicas, pero un gran cambio es que ahora los niños tienen más voz en su proceso de aprendizaje.
“Hay más discusión, es un proceso más bidireccional y los niños participan activamente en su educación.”
La tecnología también ha transformado el aula, y dijo que programas como Google Classroom han sido un ‘cambio radical’.
La señora Eley añadió: “Subo todas mis presentaciones de PowerPoint para que los niños puedan repasar los temas en casa.
“Esto ayuda mucho a los niños, especialmente si es algo que les ha resultado difícil en clase.”
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A pesar de los cambios, algunas tradiciones siguen siendo importantes.
Comentó: “Enseñar la caligrafía. La escritura a mano siempre ha sido importante en Forest, y todavía lo es hoy.”
Sin embargo, la señora Eley dijo que la lección más importante que un profesor puede transmitir a sus estudiantes es ‘la bondad, la compasión y la empatía’.