En un contexto en el que la inmigración se está convirtiendo en un tema cada vez más polarizante en España, un importante organismo fiscal ha revisado sus previsiones de inmigración hasta en un 50 por ciento, al tiempo que afirma que la población extranjera está impulsando el crecimiento económico del país.
Según los informes, España está en vías de recibir más de 600.000 inmigrantes este año, aproximadamente un 50 por ciento más de lo que las autoridades habían pronosticado previamente.
La cifra de 600.000 es un dato neto, pero informaciones del diario El Mundo sugieren que es un 50 por ciento superior a lo estimado en marzo por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF).
Esto ocurre en un momento en el que el aumento del flujo migratorio hacia España ha impulsado la economía, pero también ha contribuido al alza de precios en el mercado inmobiliario. Los análisis de la AIReF muestran un vínculo claro entre la inmigración y el crecimiento del PIB en España.
A principios de año, la AIReF calculó que España ganaría 400.000 inmigrantes en 2025, por debajo de los 571.000 de 2024. No obstante, a la vista de los datos migratorios registrados hasta ahora este año por el Instituto Nacional de Estadística (INE), dicha previsión se ha quedado notablemente corta.
“El buen momento cíclico de la economía española y el comportamiento del mercado laboral podrían atraer un mayor número de inmigrantes del esperado”, señaló Cristina Herrero, presidenta de la AIReF.
El diario El Mundo subraya que “el hecho de que la llegada de inmigrantes sea superior a lo estimado es muy importante en términos económicos, ya que se traduce en un impulso para el mercado laboral y el consumo privado”, añadiendo que explica en parte “las revisiones al alza de las estimaciones de crecimiento para la economía española de este año. Ayer, la AIReF lo elevó siete décimas porcentuales, hasta el 3 por ciento, en línea con otras instituciones”.
Como The Local ha informado previamente, la inmigración ha incentivado el crecimiento económico y demográfico de España en el período postpandemia.
En agosto, la población de España alcanzó un récord histórico de 49,3 millones de personas, gracias una vez más a la llegada de más migrantes, lo que contrarresta las tasas de natalidad mínimas del país.
“Al comparar el crecimiento real del PIB observado en España entre 2022 y 2025 se observa que, en relación con la Unión Económica y Monetaria, de los 7,7 puntos porcentuales de crecimiento diferencial de España, 4,9 se explican por el aumento de la población de 15 a 74 años y el incremento del empleo -ambos estrechamente vinculados”, afirma Herrero.
“La contribución de la población extranjera y de doble nacionalidad representa más de un tercio del crecimiento observado en los últimos años”, añadió.
De cara al futuro, la AIReF prevé una moderación en la llegada de inmigrantes, pasando de más de 650.000 anuales en el período 2022-2024 a alrededor de 600.000 este año y a una media de 300.000 entre 2026 y 2030.
Economistas y expertos pronostican que las tendencias demográficas de España implican que el país necesitará millones de trabajadores inmigrantes adicionales en las próximas décadas, particularmente para apuntalar el sistema de pensiones en una nación que envejece como España.
La inmigración se está convirtiendo en un asunto cada vez más divisivo, no sólo por los recientes disturbios antinmigrantes en Murcia y los llamamientos del partido de ultraderecha Vox a deportar a 8 millones de extranjeros. El Partido Popular (PP) también ha esbozado recientemente una batería de medidas en materia de inmigración.
Sin embargo, la evidencia sugiere que los beneficios que la inmigración aporta a España superan con creces los recelos latentes sobre el país se está volviendo cada vez más multicultural.