MANILA, Filipinas—Poy Erram ha demostrado cambios notables en su carácter dentro de la cancha.
Lo que muchos no saben es que el jugador de TNT también ha pasado por un gran cambio fuera del básquetbol.
Antes de que empiece la final entre Tropang 5G y San Miguel Beer este domingo, Erram dijo que no solo mejoró su fortaleza mental, sino que también encontró fuerza en su vida espiritual.
“Después de la final, Roger (Pogoy) tiene un mentor con quien hablé de mis problemas", contó Erram al Inquirer. "Me abrí por completo porque pasé por momentos difíciles. Él me preguntó: ‘¿quién te dio tus bendiciones?’ A veces olvidamos a quienes nos las dan. ¿Quién me dio todo esto? Fue Dios. Y a veces, me olvido de Él".
Su reflexión se notó incluso en la cancha durante la campaña de Tropang 5G en la Copa Filipina.
En el torneo pasado, Erram mostró inmadurez en la Copa del Comisionado. Durante las semifinales, perdió el control y discutió con su compañero Glenn Khobuntin. Además, en la final, tuvo un altercado con su entrenador Chot Reyes y hasta dañó un vestuario en el Mall of Asia Arena.
Pero en esta temporada, Erram mostró una actitud diferente. Su fe fue clave: "Cuando tengo problemas y no veo solución, leo la Biblia y Jesucristo me da una respuesta".
Ahora, Erram usa su experiencia para ayudar a su compañero Brandon Ganuelas-Rosser, quien también lucha por controlar sus emociones.
"Siempre le digo que se controle. Yo no lo hacía antes. Por suerte, él sí escucha", dijo Erram.
En un partido contra Barangay Ginebra, Ganuelas-Rosser fue expulsado por una falta flagrante. "A veces no actúa como él, y tengo que hablarle para que vuelva a ser el de siempre", explicó Erram.
"Aprendí esto gracias a Dios, y lo aplicaré con mis compañeros", añadió, emocionado.
Los aficionados de TNT verán más de esta nueva versión de Erram mientras Tropang 5G busca el raro Grand Slam.