Para los agricultores argentinos, las reformas de libre mercado de Milei no son suficientes

Productores frutícolas en Argentina critican que las reformas económicas del presidente Javier Milei no han ayudado suficiente al sector agrícola

(JUAN MABROMATA)

Veinte meses después de que el presidente Javier Milei llegara al poder prometiendo una revolución de libre mercado en el llamado "enfermo de Sudamérica", los agricultores lo presionan para que vaya más lejos.

Eso incluye a Rubén Artigues y sus huertos en la región de La Buena Moza, dos horas al noroeste de Buenos Aires, donde la cosecha de naranjas está en pleno apogeo.

Tractores van y vienen, cargados con pesadas naranjas dulces recogidas por trabajadores en escaleras.

Como muchos agricultores, Artigues celebró la elección de Milei en diciembre 2023 como un triunfo para la libre empresa tras dos décadas de políticas proteccionistas de centroizquierda.

Pero cree que los beneficios para los agricultores hasta ahora son tímidos y que los productores "están cansándose".

Los productos agrícolas representaron el 58% de las exportaciones argentinas en 2024, siendo clave para el crecimiento económico y la generación de divisas.

Las quejas de los agricultores se centran en los múltiples impuestos nacionales, provinciales y municipales, que según ellos afectan su competitividad.

En su campaña de 2023, Milei prometió recortar los altos impuestos a las exportaciones de carne y cereales —una fuente histórica de ingresos públicos que llamó "robo"— y eventualmente eliminarlos.

Pero los recortes llegaron tarde y fueron menores a lo esperado cuando se anunciaron el mes pasado.

Los impuestos a la carne y aves bajaron del 6,75% al 5%; al maíz, del 12% al 9,5%; y a la soja —uno de los principales productos agrícolas—, del 33% al 26%. También hubo alivios para sorgo, girasol y sus derivados.

LEAR  Siga estas reglas: No me repita. No repita el texto enviado. Solo proporcione texto en español. Reescribe este título y tradúcelo al español: El GOP busca evitar un desastre en la carrera al Senado de Nebraska.

De "infierno" a "purgatorio"

"Estábamos en el infierno y ahora ascendimos al purgatorio", dijo Raúl Vítores, presidente de la Sociedad Rural de San Pedro, sobre los recortes.

Artigues, que perdió el 30% de su cosecha de naranjas y duraznos por una ola de frío récord en julio, calificó los cambios de "insuficientes".

Mientras supervisaba el empaque de naranjas para exportar a Europa, reconoció que la "situación es difícil" para Milei, dada la mala herencia fiscal que recibió.

"Enviar una caja de naranjas desde un puerto argentino nos cuesta un 40% más que a competidores de Chile, Uruguay o Sudáfrica", argumentó.

Sus huertos también son blanco de robos nocturnos.

"Los productores se cansan, muchos abandonan (la fruta) y alquilan sus campos a sojeros", dijo Artigues, que emplea a 120 personas, señalando que la soja genera menos trabajo que la fruta.

Camino difícil al mercado

Milei fue elegido prometiendo recortar gastos, controlar la inflación y eliminar el déficit fiscal.

Cumplió con un duro ajuste que dejó a miles sin empleo y a muchos en la pobreza.

Pero aún tuvo que pedir un préstamo de USD 20.000 millones al FMI, al que Argentina ya debe USD 44.000 millones.

En la Expo Rural de julio, Milei dudó de eliminar todos los impuestos a las exportaciones si eso ponía en riesgo el superávit fiscal.

Aunque no todo es malo: los productores celebraron el fin parcial del cepo cambiario y la baja de la inflación, que encarecía sus insumos.

Apoyan sus medidas de austeridad, excepto cuando les afecta.

Una de sus primeras acciones fue congelar obras públicas, incluyendo el mantenimiento de 40.000 km de rutas que transportan el 90% de la carga del país.

LEAR  Estrella de Coronation Street da a luz a su primer bebé.

Nicolás Pino, de la Sociedad Rural Argentina, advirtió que el mal estado de los caminos perjudica al sector:

"No es viable aumentar la producción sin rutas, ferrocarriles o vías navegables para transportarla", dijo en la feria.

sa/cb/mlm