Ilan Dalal le dijo a N12 que, a pesar del daño que sufrió su hijo mientras estaba cautivo de Hamás, "poco a poco, con mucho amor y con la familia y amigos a su alrededor, va a estar bien".
Durante sus 739 días de cautiverio, el rehén liberado Guy Gilboa-Dalal enfrentó una "pesadilla" de lucha constante a manos de los terroristas de Hamás, según compartió su padre, Ilan Gilboa, con N12 el viernes.
Gilboa le contó a N12 que el resultado de "todo tipo de cosas difíciles" que su hijo le describió incluye múltiples infecciones, pérdida de audición en un oído, dolor de estómago y vómitos, además de problemas en la piel y deficiencias de vitaminas.
"Estas son cosas que supongo que son reversibles," dijo Gilboa, refiriéndose a los problemas de salud física de su hijo. "El equipo psicológico está trabajando con él para procesar lo que pasó. Poco a poco, con mucho amor y con la familia y amigos alrededor, va a estar bien".
Mientras que Gilboa no compartió mucho sobre el estado mental de su hijo, sí compartió detalles sobre lo que ayudó a Guy a sobrellevar el cautiverio.
"Guy vio de repente una entrevista en la televisión de su hermano parado con su camiseta puesta," le dijo a N12.
En ese momento, Gilboa-Dalal no sabía si su hermano había sobrevivido o no a la masacre del 7 de octubre. Al darse cuenta de que su hermano estaba vivo y abogando por su liberación, eso le dio el valor para seguir adelante.
"Le puso muy feliz y le dio mucha fuerza," dijo Gilboa.
Felicidad de ensueño después de la tragedia
Gilboa relató otro momento conmovedor en el que Guy comió uno de sus postres favoritos, bolas de chocolate caseras, por primera vez desde su liberación.
Dijo que probar el postre "lo hizo volver en sí un poco. Vimos sus reacciones, eso lo dice todo".
El informe de N12 señaló que el deseo de Gilboa-Dalal de volver a casa antes del cumpleaños número 18 de su hermana, que expresó en una carta en agosto que la Cruz Roja entregó antes, se hizo realidad.
Ilan Gilboa describió el regreso de Guy como "más feliz incluso que el día en que nació".
A pesar de las duras condiciones y las luchas que continúan resultando del cautiverio de Gilboa-Dalal, su padre compartió su perspectiva positiva para su hijo y para su familia, afirmando que "paso a paso [ellos] se recuperarán y todo va a estar bien".