Un alto funcionario de la OTAN ha declarado a la BBC que la alianza militar “apoyará a Ucrania hasta el día en que los tengamos sentados en la mesa para lograr una paz duradera”.
El Almirante Giuseppe Cavo Dragone, jefe del comité militar de la OTAN desde enero, añadió que, desde un punto de vista operativo, considera que la guerra entre Rusia y Ucrania está estancada. Dijo que “ya es casi hora de sentarse y hablar porque es un desperdicio de vidas”.
Señalando que la invasión a gran escala de Rusia a Ucrania en 2022 resultó en que dos países más se unieran a la alianza occidental -Finlandia y Suecia-, el Almirante Dragone describió la guerra como un fracaso estratégico para el presidente ruso Vladimir Putin. Esto a pesar de los recientes avances lentos e incrementales de Rusia en el campo de batalla.
“No conseguirán un gobierno amigable o títere como en Bielorrusia. Putin no tendrá éxito.”
Cuando se le preguntó si las naciones europeas estaban preparadas para continuar apoyando la defensa de Ucrania, él respondió que sí. Él cree que fue beneficioso que hayan tenido una especie de llamada de atención y que ahora estén tomando cartas en el asunto de su propia defensa.
En junio, los miembros de la OTAN acordaron aumentar su gasto en defensa al 5% del PIB para el año 2035. Esta medida siguió a los insistentes llamados del presidente estadounidense Donald Trump para que los miembros lo hicieran.
Sobre el reciente anuncio de Rusia acerca de armas de largo alcance y propulsión nuclear, como el Burevestnik y el Poseidón, el ex jefe del Estado Mayor de Defensa italiano y aviador naval restó importancia a las preocupaciones de la OTAN. Dijo que la OTAN es una alianza nuclear defensiva.
“No nos sentimos amenazados por ellos”, afirmó, “simplemente estamos listos para defender a nuestros 32 países y a nuestros mil millones de personas. Somos una alianza nuclear.”
Sobre el riesgo de futuras invasiones o ataques, el Almirante Dragone dijo que si -y enfatizó el condicional- hubiera un lugar donde fuera probable, serían los estados bálticos: Estonia, Letonia y Lituania.
Pero señaló que, como estados de la OTAN, se invocaría el Artículo 5 -que considera un ataque a una nación como un ataque a todas- y que la OTAN acudiría en su defensa.
Cuando se le preguntó si eso incluía a Estados Unidos, respondió: “Sí, porque se han comprometido a esto y han subrayado que todavía están en el negocio.”
De todas las necesidades de defensa de la OTAN en este momento, el Almirante Dragone dijo que la defensa aérea es la principal prioridad. Las recientes incursiones de drones rusos en Polonia y Rumanía han impulsado a la alianza a mejorar sus defensas aéreas.
Respecto a la posibilidad de activar un “muro de drones” teórico en las fronteras orientales de la OTAN, dijo que esto se haría en cuestión de meses y que “el Mando Aliado de Transformación de la alianza en Norfolk [Virginia] ya está trabajando en eso”.
“Hay mucho material en el mercado que cumplirá con nuestras necesidades inmediatas, así que hemos establecido una nueva actividad llamada Centinela del Este… integrando toda la defensa aérea que ya tenemos en nuestro flanco oriental.”
“Las incursiones en el espacio aéreo son bastante frecuentes, les escoltamos para que se vayan y básicamente ese es el juego,” dijo el almirante.
A pesar de no haber señales de que Rusia esté cambiando de rumbo en la guerra de Ucrania y de que algunos miembros -notablemente Eslovaquia y Hungría- estén cada vez más en contra de apoyar la defensa de Ucrania, el Almirante Dragone terminó con una nota positiva.
“La alianza es confiable, es madura, hay una cohesión que es nuestro centro de gravedad.”
“La alianza es más fuerte que nuestros adversarios, y permaneceremos con Ucrania hasta el día en que la paz estalle,” añadió.
