Donald Trump está ordenando al Secretario de Defensa de EE. UU., Pete Hegseth, que pague al personal militar a pesar del cierre del gobierno federal.
El expresidente dijo el sábado que Hegseth debe asegurarse de que las tropas reciban su paga regular, programada para el miércoles. Esta directiva llega cuando otros empleados gubernamentales ya han tenido retenciones de sueldo y otros están siendo despedidos.
“No voy a permitir que los Demócratas tomen como rehén a nuestras Fuerzas Armadas, y a toda la Seguridad de nuestra Nación, con su peligroso Cierre de Gobierno,” publicó Trump en su plataforma Truth Social.
Los partidos Republicano y Demócrata se culpan mutuamente por no llegar a un acuerdo sobre un plan de gastos para reabrir el gobierno.
El mensaje de Trump le pide a Hegseth que “use todos los fondos disponibles para PAGAR a nuestras Tropas” el 15 de octubre, fecha en la que el personal militar vería su paga retenida por primera vez desde que comenzó el cierre el 1 de octubre.
Muchos empleados militares estadounidenses son considerados “esenciales”, lo que significa que deben presentarse a trabajar sin paga. Alrededor de 750,000 otros empleados federales – aproximadamente el 40% – han sido suspendidos, o enviados a casa, también sin paga.
Se supone que legalmente, los empleados suspendidos deben recibir el pago retroactivo después de que termina un cierre y regresan al trabajo, pero el gobierno de Trump ha insinuado que esto podría no suceder.
“Los Demócratas de la Izquierda Radical deberían ABRIR EL GOBIERNO, y luego podemos trabajar juntos para abordar el sistema de Salud, y muchas otras cosas que ellos quieren destruir,” publicó Trump el sábado.
Los Demócratas se han negado a votar por un plan de gastos republicano que reabriría el gobierno después de casi 12 días de cierre, diciendo que cualquier resolución debe preservar los créditos fiscales que expiran y que reducen los costos del seguro de salud para millones de estadounidenses, y revertir los recortes de Trump a Medicaid, el programa de salud para personas mayores y de bajos ingresos.
Los Republicanos acusan a los Demócratas de paralizar el gobierno innecesariamente, y los culpan por los efectos secundarios causados por la paralización del trabajo federal.
Encontrar una forma de pagar los salarios militares podría ayudar a reducir algo del riesgo político para los líderes del Congreso si el cierre se prolonga.
En un esfuerzo por presionar a los Demócratas, el gobierno de Trump también ha comenzado a despedir a miles de trabajadores gubernamentales, un movimiento sin precedentes durante un cierre.
“Los RIF han comenzado,” anunció el Director de la Oficina de Gestión de la Casa Blanca, Russell Vought, en una publicación en X el viernes por la mañana, refiriéndose al acrónimo en inglés de “reducciones de fuerza”.
El gobierno informó más tarde el viernes que siete agencias habían comenzado a despedir a más de 4,000 personas, cumpliendo así las repetidas amenazas del expresidente de usar el cierre para avanzar en su objetivo de reducir la fuerza laboral federal.
Las reducciones incluyeron docenas de empleados en los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), según la BBC citando fuentes familiarizadas con la situación.
Toda la oficina de Washington DC de la agencia fue despedida, dijeron las fuentes, agregando que entre los empleados despedidos había quienes trabajaban en el Informe Semanal de Morbilidad y Mortalidad de los CDC, en la respuesta al Ébola y en inmunizaciones. También hubo reducciones en el departamento de recursos humanos, dijeron.
Andrew Nixon, un portavoz del Departamento de Salud y Servicios Humanos, que supervisa los CDC, dijo que los trabajadores despedidos no eran esenciales, y que “HHS continúa cerrando entidades derrochadoras y duplicadas, incluidas aquellas que están en desacuerdo con la agenda ‘Hacer a América Saludable Otra Vez’ del gobierno de Trump”.
Empleados del Departamento del Tesoro y de la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad en el Departamento de Seguridad Nacional también se encontraban entre los despedidos el viernes, confirmaron esas agencias.
La Federación Estadounidense de Empleados Gubernamentales y la AFL-CIO, dos grandes sindicatos que representan a trabajadores federales, han presentado una demanda en el norte de California, pidiendo a un juez que bloquee temporalmente las órdenes de despido.
“Es vergonzoso que el gobierno de Trump haya usado el cierre del gobierno como una excusa para despedir ilegalmente a miles de trabajadores que brindan servicios críticos a comunidades en todo el país,” dijo el presidente de AFGE, Everett Kelley.
Un portavoz de la oficina de presupuesto de la Casa Blanca le dijo a la BBC el sábado que los despidos eran solo el comienzo.
“Estos números de RIF de la presentación judicial son solo una instantánea en el tiempo,” dijo. “Vienen más RIFs.”
En un documento judicial oponiéndose a la solicitud de los sindicatos de una orden de restricción temporal, el departamento de Justicia reveló que agencias como los Departamentos de Educación, Vivienda y Desarrollo Urbano, Comercio y Energía y la Agencia de Protección Ambiental también podrían sufrir recortes de personal.
Los abogados del gobierno dijeron que los sindicatos no lograron establecer que sus miembros sufrirían un daño irreparable por los despidos, lo cual es necesario para que el juez otorgue la orden de restricción. Pero dijeron que una orden de restricción “dañaría irreparablemente al gobierno”.
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