No hay muchas personas más famosas que Oprah Winfrey, así que era lógico que ella disfrutara de un crucero por Mallorca a bordo del yate conocido como el “yate de las estrellas.” Oprah viajó a Mallorca desde Venecia, donde había asistido a la boda de Jeff Bezos y Lauren Sánchez.
En Mallorca la esperaba el súper yate *Rising Sun*, que llevaba un mes navegando por las aguas mallorquinas. La personalidad mediática estadounidense, con un patrimonio estimado en más de tres mil millones de dólares, estuvo acompañada por un grupo de amigos. Oprah ya había sido una invitada frecuente en el yate.
El *Rising Sun* es propiedad del empresario David Geffen desde 2010, quien inicialmente compró la mitad del yate a fines del 2006. Entre sus 82 habitaciones, destacan un gimnasio, una cancha de baloncesto, una bodega y un cine.
Entre los invitados al yate de Geffen figuran Leonardo DiCaprio, Paul McCartney, Bruce Springsteen y la propia Oprah Winfrey.
A principios de la pandemia del COVID-19, en marzo del 2020, Geffen recibió críticas por publicar en Instagram que él y su tripulación de 45 personas se aislaban en las Granadinas a bordo del *Rising Sun*.
