Martina Hingis una vez habló sobre su infancia para aclarar las ideas incorrectas en los medios. La tenista suiza también explicó la relación que tenía con su madre cuando era joven.
Hingis empezó a jugar al tenis con solo dos años, guiada por su madre, Melanie Molitor. La suiza se unió al circuito profesional cuando tenía solo 14 años y luego ganó cinco títulos de Grand Slam en individuales cuando todavía era una adolescente. Aunque su adolescencia fue dominada por el tenis, la ex número uno del mundo no sintió que se perdió de nada.
En una entrevista, le preguntaron a Hingis si alguna vez lamentó no tener una infancia normal. Pero la suiza no estaba de acuerdo con esa idea.
En cambio, Hingis describió su juventud como ‘maravillosa’, recordando que pasaba la mayoría de su tiempo en la cancha con otros 14 jugadores jóvenes. También negó la idea de que estaba bajo presión constante para entrenar, insistiendo en que aunque su madre tenía el control, ella tenía libertad para tomar sus propias decisiones.
“¿Quién dice que no la tuve? Crecimos en la cancha de tenis con muchos niños, primero en la República Checa, luego en Suiza. Éramos hasta 14 en las canchas, y todos pasamos nuestras infancias allí,” dijo Martina Hingis.
“Fue una época maravillosa que recuerdo con cariño. Nunca fue como lo pintaban, que yo siempre estaba bajo presión en la cancha y tenía que entrenar. Mi madre siempre estaba allí, siempre controlando todo. Pero yo siempre era libre y podía tomar mis propias decisiones. Tuve una infancia normal,” añadió.
Sin embargo, Martina Hingis sí compartió antes una experiencia traumática de su infancia. La suiza reveló que estuvo muy triste por tener que dejar su “vida feliz” en Checoslovaquia para mudarse a Suiza cuando tenía siete años.
Martina Hingis: “Creo que las jugadoras deben cambiar al equipo femenino a los 16 años como máximo”
Durante la misma entrevista, Martina Hingis admitió que si pudiera volver atrás en el tiempo, todavía elegiría debutar en el circuito de la WTA a los 14 años. La suiza dijo que creía que era mejor para el juego de una jugadora competir con rivales profesionales más temprano en sus vidas.
Hingis enfatizó su opinión de que las jugadoras no deberían esperar más de los 16 años para unirse al circuito profesional porque tenían experiencia vital que ganar.
“¡Claro! Creo que es una lástima que las chicas de hoy en día solo tengan la oportunidad de competir con las profesionales tan tarde. Cuando eres joven, aprendes más rápido y mejor. Te expones al tenis profesional antes, lo que te ayuda después,” dijo Hingis.
“Creo que las jugadoras deben hacer la transición al equipo femenino a los 16 años como máximo. Seguro, pierdes partidos más rápido y te das cuenta de que el nivel es más alto que en la categoría juvenil. Pero cuanto antes ganes estas experiencias, mejor,” añadió.
Martina Hingis finalmente dejó la raqueta para siempre en las Finales de la WTA en 2017, el mismo año en que ganó los títulos de dobles femenino y mixto en el US Open. La suiza tenía 25 títulos de Grand Slam en total cuando se retiró.