La Policía de Transporte Británica se encuentra al frente de la investigación sobre los apuñalamientos en el tren cerca de Cambridge.
Crédito: X – Policía de Transporte Británica
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Un trayecto rutinario en tren se convirtió en una escena de caos y horror el sábado por la tarde cuando nueve pasajeros resultaron apuñalados en un tren con destino a Londres cerca de Huntingdon, Cambridgeshire.
La Policía de Transporte Británica confirmó la detención de dos hombres, y la investigación –en la que ahora participan agentes antiterroristas– se centra en esclarecer los motivos que condujeron al impactante ataque al servicio de las 18:25 de London North Eastern Railway (LNER) con ruta de Doncaster a King’s Cross.
El Primer Ministro Keir Starmer condenó lo que calificó de “suceso espantoso”, trasladando su solidaridad a las víctimas y agradeciendo a los equipos de emergencia su rápida actuación.
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Pasajeros atrapados en el terror durante el despliegue del ataque con cuchillo
Testigos describieron escenas de pánico cuando estalló el caos a bordo del tren poco después de salir de Peterborough. Según los relatos, los pasajeros corrían por los vagones gritando advertencias como: “Tienen un cuchillo, me han apuñalado”.
Un testigo declaró a Sky News que el agresor apareció de súbito, dejando a varias personas heridas en cuestión de momentos. “Estaba profusamente ensangrentado”, recordó el pasajero. “Para cuando el tren se detuvo, yacían en el suelo. Esa persona acabó desplomándose, y fue trasladada inmediatamente en ambulancia.”
La policía armada acudió rápidamente a la Estación de Huntingdon tras recibir llamadas de emergencia sobre las 19:39. El tren fue detenido y los agentes procedieron con celeridad a detener a dos hombres. Otro testigo relató que los oficiales armados apuntaron con sus armas a un hombre en el andén que blandiaba un cuchillo grande, quien posteriormente fue reducido con una pistola Taser e inmovilizado.
Informaciones procedentes de pasajeros sugieren que el número total de heridos podría oscilar entre ocho y doce personas.
El Jefe de Superintendentes Chris Casey, de la Policía de Transporte Británica, declaró: “Estamos realizando pesquisas urgentes para determinar lo ocurrido. En esta fase inicial, no sería apropiado especular sobre las causas del incidente.”
El cuerpo de seguridad activó brevemente el “Protocolo Plato”, el procedimiento de emergencia nacional empleado en presuntos incidentes terroristas, antes de confirmar que la alerta había sido rescindida una vez quedó claro que no existía una amenaza inminente.
Respuesta de emergencia y testimonios de testigos
El Servicio de Ambulancias del Este de Inglaterra desplegó lo que describió como una “respuesta de grandes proporciones”, con múltiples ambulancias, equipos de paramédicos y un equipo especializado de respuesta en áreas de riesgo enviados al lugar.
“Podemos confirmar que hemos trasladado a múltiples pacientes al hospital”, declaró un portavoz, añadiendo que varias personas recibían tratamiento por heridas de pronóstico vital.
Grabaciones del lugar de los hechos mostraban las luces azules de emergencia iluminando el cielo nocturno en la Estación de Huntingdon, mientras los equipos de rescate coordinaban las labores de triaje en el andén.
El diputado local Ben Obese-Jecty elogió la respuesta, calificándola como “la más contundente y eficaz que he presenciado nunca”. Añadió: “Resulta muy tranquilizador ver una respuesta tan rápida y coordinada por parte de la policía, los bomberos y los servicios de ambulancia”.
El incidente provocó importantes disrupciones a lo largo de la Línea Principal de la Costa Este, con LNER advirtiendo a los pasajeros que no viajasen y confirmando que todas las vías estaban bloqueadas debido a la emergencia.
En un comunicado, LNER afirmó: “Estamos experimentando graves disrupciones en nuestra ruta. Los servicios de emergencia están actuando en un incidente en la Estación de Huntingdon; todas las vías están cortadas. Nuestra recomendación es ‘No Viajar’.”
National Rail confirmó posteriormente que las disrupciones podrían prolongarse hasta el lunes, manteniéndose la estación de Huntingdon cerrada por las investigaciones.
Reacciones políticas y policiales: demandas de calma y claridad
El Primer Ministro tachó el suceso de “profundamente preocupante”, instando al público a mantener la calma y seguir las indicaciones policiales. “Mi solidaridad con todos los afectados”, escribió Starmer en X (antiguamente Twitter). “Deseo agradecer a los servicios de emergencia su intervención.”
La Secretaria de Interior, Shabana Mahmood, se hizo eco de ese sentir, manifestando sentirse “profundamente consternada” por los hechos y solicitando al público que se abstenga de especular mientras prosigue la investigación.
Mientras tanto, el Secretario de Interior en la Sombra, Chris Philp, describió el ataque como una “brutal apuñalamiento masivo” y urgió a las autoridades a proporcionar una actualización clara lo antes posible.
La policía antiterrorista está prestando asistencia en la investigación, aunque los oficiales subrayaron que aún no se ha establecido ningún móvil.
La Policía de Cambridgeshire ha solicitado a cualquier persona con información que se ponga en contacto, citando el número de incidente 495 del 1 de noviembre. Los agentes continúan solicitando cualquier grabación o fotografía de testigos que pueda contribuir a reconstruir la secuencia de los hechos.
Una comunidad conmocionada aguarda respuestas
Por el momento, los investigadores trabajan para comprender qué desencadenó el ataque que ha dejado a nueve personas luchando por sus vidas y a muchos otros traumatizados.
Los residentes de Cambridgeshire y los usuarios del ferrocarril en todo el Reino Unido han expresado su consternación por la violencia sufrida en lo que debió ser un trayecto normal de sábado.
Mientras las víctimas permanecen hospitalizadas y los agentes prosiguen sus pesquisas, el foco se despliega ahora hacia cómo pudo producirse un ataque de esta naturaleza —y qué debe hacerse para garantizar que no vuelva a suceder jamás.