Merlyn Thomas, Matt Murphy y Peter Mwai
BBC Verify
Advertencia: Esta historia contiene descripciones gráficas de ejecuciones.
Los combatientes se ríen mientras viajan en la parte trasera de una camioneta, pasando a toda velocidad por una fila de nueve cadáveres y dirigiéndose hacia el sol poniente de Sudán.
“Miren todo este trabajo. Miren este genocidio”, celebra uno.
Sonríe mientras enfoca la cámara hacia sí mismo y sus compañeros de lucha, mostrando sus distintivos de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF): “Todos morirán así”.
Los hombres están celebrando una masacre que, según funcionarios humanitarios, mató a más de 2,000 personas en la ciudad sudanesa de el-Fasher el mes pasado. El lunes, la Corte Penal Internacional (CPI) dijo que está investigando si este grupo paramilitar pudo haber cometido “crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad”.
El-Fasher era un objetivo clave para las RSF. Era el último bastión en Darfur en manos del ejército sudanés, contra quien las RSF libran una guerra devastadora desde que su coalición gobernante colapsó en 2023.
Se estima que más de 150,000 personas han muerto por los combates en los últimos dos años y ambas partes están acusadas de una larga lista de crímenes de guerra, muchos de los cuales fueron repetidos por las RSF tras la caída de el-Fasher.
Una ciudad aislada del mundo
Después de mantener la ciudad sitiada por casi dos años, desde agosto las RSF pasaron a consolidar su posición y bloquear a la población civil restante.
Imágenes satelitales muestran que las tropas comenzaron a construir un gran terraplén, una barrera de arena elevada, alrededor del perímetro de el-Fasher, sellando las rutas de acceso y bloqueando la ayuda. Para principios de octubre, el anillo rodeaba completamente la ciudad, con una barricada más pequeña circundando un pueblo vecino.
Mientras el sitio se intensificaba, 78 personas murieron en un ataque de las RSF a una mezquita el 19 de septiembre, mientras que la ONU dijo que 53 más murieron en ataques con drones y artillería en un campamento de desplazados en octubre.
Videos compartidos con BBC Verify también sugirieron que las RSF buscaron imponer un bloqueo de comida y suministros esenciales. En octubre, un video muestra a un hombre con las manos y pies atados por detrás, colgando boca abajo de un árbol con cadenas de metal. El hombre que graba el video lo acusa de intentar contrabandear suministros a la ciudad sitiada.
“Te juro por Dios que pagarás por esto, perro”, grita, antes de exigir que el cautivo suplique por su vida.
Mientras tanto, las RSF avanzaron en la ciudad con tropas enfrascadas en frenéticos combates callejeros.
Imágenes gráficas muestran personas desarmadas siendo fusiladas
Al amanecer del 26 de octubre, las RSF superaron las últimas posiciones del ejército y se apoderaron de la base principal en la ciudad, la sede de la 6ª División de Infantería, mientras el ejército se retiraba.
Se grabó a soldados riéndose mientras recorrían el cuartel general abandonado llevando un lanzagranadas. Ese mismo día, se vio al comandante de las RSF Abdul Rahim Dagalo, hermano del jefe de las RSF Mohammad ‘Hemedti’ Dagalo, inspeccionando la base.
Las RSF, que surgieron de la milicia Janjaweed que mató a cientos de miles de personas en Darfur entre 2003 y 2005, han sido acusadas durante mucho tiempo de cometer atrocidades contra grupos no árabes en Sudán. Material publicado en línea sugirió que los paramilitares pretendían desatar violencia contra la población civil en el-Fasher.
Antes de que los paramilitares tomaran el-Fasher, durante meses había surgido muy poca información de la ciudad. Pero a las pocas horas del colapso militar, comenzaron a aparecer en línea imágenes de atrocidades cometidas por las RSF, rompiendo el silencio que había caído sobre la ciudad.
Uno de los videos más gráficos que surgieron y que fue analizado por BBC Verify mostraba las consecuencias de una masacre en un edificio universitario al oeste de la ciudad, donde se veían docenas de cadáveres esparcidos por el suelo.
Un hombre mayor con una túnica blanca estaba sentado solo entre los cuerpos. Se volteó a mirar cuando un combatiente armado con un rifle bajaba las escaleras hacia él. Apuntando su arma, el hombre armado disparó una vez al hombre, que cayó al suelo sin movimiento. Otros soldados, sin inmutarse por el acto, inmediatamente vieron la pierna de otro hombre moverse entre el amasijo de cuerpos.
“¿Por qué este sigue vivo?”, gritó un combatiente. “Disparale”.
Imágenes satelitales tomadas el 26 de octubre parecieron confirmar que las ejecuciones también se llevaron a cabo en las calles de el-Fasher, según un informe del Yale Humanitarian Research Lab.
Sus analistas destacaron grandes “grupos” visibles en las imágenes, que dijeron son “consistentes con el tamaño de cuerpos humanos adultos y no están presentes en imágenes anteriores”. También señalaron una “decoloración” que, según el informe, podrían ser marcas causadas por sangre humana.
Un testigo que habló con la BBC dijo haber visto “a muchos de nuestros parientes siendo masacrados; fueron reunidos en un lugar y todos asesinados”.
Otro testigo recordó ver morir a una mujer después de que las RSF “le dispararon en el pecho” antes de tirar su cuerpo a un lado “después de quitarle todas sus pertenencias”.
Mientras la fuerza principal de las RSF arrasaba el-Fasher, un grupo separado de combatientes permaneció en la periferia de la ciudad, donde participaron en las brutales ejecuciones de varios cautivos desarmados.
Gran parte de esta violencia ocurrió en un lugar a unos 8 km de el-Fasher. Videos verificados muestran docenas de cadáveres con ropa civil, algunos de los cuales parecen ser mujeres, tirados en una zanja que corre junto al perímetro del terraplén de arena construido por las RSF.
Otros clips muestran escenas de destrucción, con incendios furiosos y los restos carbonizados de camiones esparcidos por el paisaje. Videos de la escena también muestran cuerpos esparcidos entre los vehículos.
Una figura clave en la violencia fue previamente identificada por BBC Verify como un comandante de las RSF que utiliza el nombre Abu Lulu en línea. Se le mostró ejecutando a cautivos desarmados en dos videos, mientras un testigo le dijo a la BBC que “dio una orden a sus hombres de matar a varias personas inocentes, incluidos niños”.
Un clip mostraba a un soldado de las RSF intentando interceder mientras Abu Lulu se preparaba para ejecutar a un hombre herido, mientras el cautivo suplicaba: “Yo lo conozco. Lo llamé hace unos días”.
Abu Lulu desestimó las súplicas del hombre con un movimiento de brazos, declarando: “Nunca tendré piedad. Nuestro trabajo es solo matar”. Después de apuntar su rifle casi con despreocupación, el combatiente soltó una ráfaga de balas que atravesaron al hombre desarmado.
Otro video lo mostraba matando a un grupo de nueve cautivos desarmados. Material que surgió días después reveló que los cuerpos fueron dejados donde cayeron, todavía alineados al estilo de una ejecución y tirados en el polvoriento suelo de Darfur.
Muchos de los involucrados en las matanzas llevaban distintivos de las RSF, incluido el grupo que luego celebró la masacre como un “genocidio”.
Comandantes de las RSF buscan controlar los daños
En los días posteriores a la masacre, el líder de las RSF, el Gral. Mohamed Hamdan Dagalo, admitió que sus tropas habían cometido “violaciones” y dijo que los incidentes serían investigados. Un alto funcionario de la ONU dijo la semana pasada que las RSF habían notificado que habían arrestado a algunos sospechosos dentro de sus filas.
Entre los detenidos estaba Abu Lulu, después de que BBC Verify publicara un informe documentando sus asesinatos. Un video cuidadosamente coreografiado y editado, publicado en la cuenta oficial de Telegram de las RSF, lo muestra siendo llevado a una celda en una prisión en las afueras de el-Fasher.
Analistas de Yale también acusaron a las RSF de “realizar labores de limpieza de sus presuntas atrocidades masivas”. Un informe emitido el 4 de noviembre señaló que imágenes satelitales muestran la remoción “de objetos consistentes con cuerpos desde un lugar al norte del terraplén de las RSF” e identificaron tumbas cerca del hospital infantil en el-Fasher.
BBC Verify midió objetos blancos vistos en el patio del hospital el 30 de octubre, con longitudes entre 1.6m y 2m. Esto es similar a la altura de un adulto humano y consistente con un cuerpo en una mortaja comúnmente vista en Sudán.
Mientras tanto, las RSF y cuentas afiliadas en redes sociales comenzaron a buscar reformular la narrativa.
Algunos usuarios compartieron publicaciones mostrando a sus combatientes repartiendo ayuda a civiles, mientras que la oficina de medios del grupo paramilitar compartió varios clips que pretenden mostrar el trato humano a prisioneros de guerra del ejército.
A pesar de la campaña en redes sociales desplegada por las RSF, sus acciones en el-Fasher han provocado indignación mundial.
BBC Verify se acercó a las RSF, ofreciéndole la oportunidad de responder a las acusaciones contenidas en esta investigación. El grupo no respondió.
Reportaje adicional de Kevin Nguyen, Kumar Malhotra, Richard Irvine-Brown, Alex Murray, Barbara Metzler, Lamees Altalebi y Ahmed Nour. Gráficos de Jess Carr y Mesut Ersoz.
