LO QUE HAY QUE SABER
Una niña de 12 años fue atacada por un mono durante un viaje familiar a Bali, Indonesia, la semana pasada, según informó News.com.au. Después de que la mordiera en el cuello, la familia, que es de Sídney, Australia, la llevó rápidamente a una clinica local para que le pusieran la vacuna contra la rabia.
La familia se vió obligada a pagar más de 4.100 dólares de su propio bolsillo por la atención médica. Los residentes de Sídney, Flavia McDonald, su marido y su hija Lorena, viajaron a un destino turístico popular en Indonesia. La familia se fue a Bali como una escapada de último momento para celebrar el Día del Padre australiano.
“Yo había estado en Bali muchas veces, pero era un lugar que me daba reparo con niños por la ‘Bali belly’ (un término para la diarrea del viajero). Pensé que quizás cuando [Lorena] fuera mayor… podríamos disfrutarlo más”, dijo McDonald al medio. “Pero en agosto, con tanta lluvia en Sídney, mi hija tuvo la idea de un lugar soleado para las vacaciones como regalo por el Día del Padre”.
La familia, que partió la mañana del Día del Padre, se alojó en un hotel en Seminyak. Para evitar la lluvia que ya estaba interrumpiendo su viaje, fueron a Ubud para visitar el famoso Bosque de los Monos de Ubud.
McDonald explicó que la familia caminó por el parque unos 40 minutos antes de sentarse con otros invitados en un anfiteatro. “Había montones de personas sentadas, así que mi marido y mi hija también se sentaron allí”, dijo McDonald. “Podíamos ver monos, pero ninguno encima o alrededor de la gente. Pero en un minuto, un mono saltó sobre los hombros de mi marido… y en segundos pasó de su hombro al de mi hija”.
Ella añadió: “Ella estaba paralizada [por el miedo] y más o menos sabíamos que no podíamos hacer movimientos bruscos. Entonces el mono empezó a tirar de su camisa, de sus bolsillos, mirando en su blusa y cuando me acerqué a ella para ahuyentarlo, en cinco segundos, la mordió en el cuello”.
Según el sitio web del bosque, se instruye a los visitantes a mantener una distancia segura de los monos, interactuar solo de manera supervisada, evitar el contacto visual directo y cuidar a los niños, todo lo cual McDonald afirma que la familia siguió.
“Miré su cuello y solo dije: ‘Dios mío’”, recordó. “[Lorena] pensó que era un rasguño… pero luego vimos la marca de la mordedura con sangre… Todo fue muy rápido”.
Aunque el parque estaba lleno, la madre dijo que no había empleados cerca. Así que la familia se dirigió rápidamente al puesto de primeros auxilios del parque, donde el personal descartó las preocupaciones sobre la rabia porque los “monos estaban muy limpios”. En su lugar, el personal bañó a la niña con agua y jabón.
“Ella sangraba… y yo pensaba, esto no es suficiente. Por dentro estaba explotando”, dijo McDonald. “Toda mi investigación decía que esto era muy peligroso y que necesitaba ir a una clínica con la vacuna contra la rabia”.
Cuando llegaron a una clínica cercana, McDonald recordó que su hija todavía estaba en “shock”. Lorena recibió dos inyecciones, una en la parte superior de la mordedura y otra en la inferior. “Nunca la había visto gritar como lo hizo en ese hospital”, dijo McDonald sobre la vacuna de su hija.
McDonald también dijo que a Lorena le recetaron medicamentos para el “virus del herpes B”: seis tabletas al día durante dos semanas.
Un shock adicional fue la factura médica, que ascendió a 69 millones de rupias indonesias, más de 4.100 dólares. Aunque la familia tenía seguro de viaje, este no se distribuiría hasta dentro de unos días, por lo que tuvieron que pagar de su bolsillo.
“Si hubiera leído algo así, algo similar, habría tenido un enfoque diferente al ir al parque”, dijo McDonald. “Habría estado un poco más consciente de que algo así realmente puede pasar. Nos arruinó el viaje”. ### Cosas Importantes para Saber