Se espera que Israel apruebe hoy un nuevo plan para controlar Gaza, con el objetivo de destruir completamente a Hamás y asegurar la liberación de rehenes, a pesar de la oposición nacional e internacional y las advertencias sobre una crisis humanitaria que empeora en el enclave.
Antes de una reunión del gabinete el jueves, el primer ministro Benjamin Netanyahu confirmó que Israel planea tomar control del territorio, pero “no queremos gobernarlo.”
“Queremos entregarlo a fuerzas árabes que lo gobiernen correctamente sin amenazarnos,” dijo Netanyahu a Fox News.
La operación podría durar hasta cinco meses e incluiría un esfuerzo por fases con operaciones militares y mayor apoyo humanitario, según reportaron medios israelíes. Sin embargo, varios ministros e incluso el jefe militar de Israel han advertido sobre el plan, y uno dijo a un medio israelí que el país podría terminar “entrando conscientemente en un modelo tipo Vietnam.”
La posible expansión de las operaciones llega mientras los gazatíes enfrentan hambre y enfermedades generalizadas, y la ONU advierte que la ayuda humanitaria está muy por debajo de lo necesario.