Hace dos años, los conservadores de Trafford propusieron una solución práctica y económica para arreglar las carreteras del municipio, que están en mal estado: invertir en una máquina Pothole Pro.
Por unos £140,000, esta máquina innovadora podría haber reparado los baches en Trafford de forma permanente y a un costo mucho menor. Pero el Partido Laborista dijo que no.
Esa decisión, sumada a los recortes en proyectos importantes como el repavimentado de Oldfield Road, ha dejado a los vecinos con calles llenas de baches y reparaciones tan mal hechas que se rompen otra vez en semanas.
Las carreteras de Trafford ahora están entre las peores de Greater Manchester.
La velocidad de reparación es terrible, la calidad del trabajo es inconsistente, y los residentes pagan las consecuencias: daños a los coches, impuestos más altos y molestias.
Una solución inteligente rechazada por el Laboral
En el 2023, los conservadores propusieron invertir en la JCB Pothole Pro, una máquina británica que repara baches en solo 8 minutos, de forma permanente.
Varios ayuntamientos ya la usan con excelentes resultados: menos gastos y menos quejas.
Por solo £140,000 (menos que un contrato temporal), Trafford podría haber empezado a arreglar sus calles atrasadas. Esta tecnología habría marcado la diferencia.
Pero el Laboral rechazó la propuesta.
Los residentes pagan las consecuencias
Dos años después, la situación está peor que nunca. Desde Timperley hasta Stretford, Altrincham a Sale, Urmston a Partington, las calles se rompen y se hunden.
En Oldfield Road, cancelaron el repavimentado sin explicación.
En Broadheath, los baches “arreglados” el mes pasado ya volvieron.
En Bowdon y Hale, algunos calles están tan mal que los coches se desvían para no dañarse, poniendo en riesgo a los peatones.
En todo Trafford, hay quejas sobre reparaciones mal hechas que duran poco. Los vecinos dicen que solo “tapan charcos” en vez de arreglar el problema.
No es solo una molestia. Es un riesgo de seguridad, un gasto innecesario y una muestra de que el ayuntamiento no sabe qué hacer.
Las prioridades del Laboral están mal
Mientras no arreglan las calles, el Laboral gasta dinero en ampliar el equipo de comunicación, proyectos vanidosos y publicidad para tapar los problemas (literal y figuradamente).
Los residentes no quieren propaganda. Quieren calles seguras y en buen estado.
Rechazar la Pothole Pro no fue solo un error, fue una decisión política. Ignorar el sentido común, preferir parches temporales sobre ahorros a largo plazo, y dejar a los vecinos en segundo plano.
Nosotros lo haríamos bien
Para los conservadores, el mantenimiento de las calles no es un lujo, es una obligación. Por eso vamos a:
Invertir en la Pothole Pro o tecnología similar para reparaciones rápidas y de calidad.
Inspecciones independientes para garantizar que las reparaciones cumplan los estándares.
Publicar un calendario de mantenimiento para que los vecinos sepan cuándo y dónde se trabaja.
Priorizar el mejor uso del dinero con contrataciones inteligentes.
Enfocarnos en reparaciones permanentes, no parches inútiles.
También revisaremos proyectos cancelados como Oldfield Road y escucharemos a los vecinos sobre qué calles necesitan atención urgente.
Es hora de cambiar
La verdad es que este desastre se pudo evitar.
Si el Laboral hubiera apoyado la Pothole Pro hace dos años, las calles estarían mucho mejor. Los vecinos no sufrirían suspensiones rotas, neumáticos reventados o condiciones peligrosas.
En vez de eso, Trafford está atrapado en un ciclo de retrasos, negación y deterioro.
El Laboral no sabe cómo solucionarlo. Nosotros sí.
Trafford merece un liderazgo que tome en serio las infraestructuras, que planee con anticipación, gaste con sabiduría y arregle los problemas como debe ser.
Estamos listos para hacerlo.
Arreglemos nuestras calles y arreglemos este ayuntamiento.
Nathan Evans es el líder de los conservadores de Trafford.