Reed Brody, exfiscal de Nueva York y un reconocido abogado de derechos humanos famoso por hacer que los dictadores rindan cuentas, está ahora dando la alarma en su propio país. Él describe lo que ve como un "ataque sin precedentes a la libertad de expresión" en los Estados Unidos: un esfuerzo amplio y sistemático para silenciar cualquier disidencia (en los medios, bufetes de abogados, ONG, universidades) utilizando todos los mecanismos del gobierno. Y esto va mucho más allá de la censura, nos dice Brody. “Es una prueba de lealtad a Donald Trump", impuesta mediante presión corporativa y amenazas regulatorias. Él señala casos recientes como la suspensión del programa de Jimmy Kimmel, y el anuncio de CBS de que cancelará The Late Show con Stephen Colbert en mayo del 2026, durante cruciales negociaciones de una fusión multimillonaria con reguladores federales. Desde la televisión nocturna hasta las universidades de élite, Brody argumenta que las voces disidentes están siendo presionadas por medios indirectos pero deliberados, no violando la Primera Enmienda, sino explotando todos los vacíos legales posibles, acompañados por los inmensos mecanismos de poder. “Lo que está pasando es mucho más pernicioso y peligroso," que violar la libertad de expresión, advierte. “Es dirigido, sofisticado y envuelto en legalidad."
