El ministro de relaciones exteriores de Rusia declaró el lunes, pocas horas después de que el presidente Trump destacara avances hacia un alto al fuego para terminar la guerra en Ucrania, que la posición negociadora de Moscú cambiaría después de un presunto intento de Ucrania por atacar una de las residencias lejanas del presidente Vladimir Putin.
Sergey Lavrov, un confidente cercano a Putin y el canciller ruso por mucho tiempo, dijo que el Kremlin ya había decidido medidas de represalia contra Ucrania, las cuales no especificó.
Lavrov acusó a Ucrania de lanzar docenas de drones para atacar la residencia de Putin en la región de Nóvgorod, a cientos de kilómetros de Moscú y cerca de las fronteras occidentales de Rusia con los estados bálticos de Estonia, Letonia y Lituania. Lavrov dijo que se interceptaron 91 drones ucranianos y que no hubo víctimas ni daños materiales.
El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy rápidamente emitió un comunicado calificando la acusación rusa de “mentiras” y un esfuerzo por socavar las conversaciones de paz impulsadas por la administración Trump.
El presidente Trump recibe al presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy en su residencia Mar-a-Lago para una reunión y un almuerzo a puerta cerrada en Florida, 28 de diciembre de 2025.
El presidente Trump se reunió con Zelenskyy el domingo en el complejo Mar-a-Lago del líder estadounidense en Florida, después de lo cual el Sr. Trump afirmó nuevamente que Putin estaba comprometido con la paz y que “Rusia quiere ver a Ucrania triunfar.”
Ese comentario atrajo considerable atención, dado que Putin y sus ayudantes han rechazado repetidamente el derecho de Ucrania a siquiera existir como nación independiente.
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, dijo en una publicación en redes sociales que el Sr. Trump mantuvo otra “llamada positiva con el presidente Putin sobre Ucrania” el lunes, pero no ofreció más detalles de la conversación, y no estaba claro si los presidentes habían hablado antes o después de que Moscú acusara a Kiev de atacar la residencia de Putin.
Lavrov no dijo cómo o cuándo Rusia cambiaría su posición negociadora en las conversaciones para poner fin a la guerra, ya casi cuatro años desde que Putin ordenó la invasión a gran escala de Ucrania, a la que su gobierno aún se refiere sólo como una operación militar especial. Pero el propio Putin dijo a inicios del lunes, durante una reunión con su comandante militar, que “en el futuro cercano, es necesario continuar la ofensiva.”
El presidente ruso Vladimir Putin preside una reunión sobre la “operación militar especial” durante la guerra entre Rusia y Ucrania, en Moscú, 29 de diciembre de 2025.
Putin incluso expresó optimismo en que las fuerzas rusas podrían tomar el control de las cuatro regiones del este de Ucrania sobre las que declaró dominio aproximadamente siete meses después de la invasión total: Donetsk y Lugansk en el Donbás, junto con Jersón y Zaporiyia.
Ucrania y sus socios europeos han advertido desde hace tiempo que el diálogo continuo de Putin con la administración Trump sobre Ucrania es en realidad una jugada para ganar tiempo, mientras su ejército expande su control sobre el territorio ucraniano.
Zelenskyy dijo después de sus conversaciones del domingo con el Sr. Trump que creía que EE.UU. y Ucrania habían alcanzado aproximadamente un 90% de acuerdo en un borrador de plan de paz de 20 puntos, pero ambos hombres reconocieron que quedaban asuntos pendientes. Estos incluyen la demanda inflexible de Rusia de que se le otorgue soberanía sobre todo el Donbás.
Ucrania, junto con sus socios europeos, ha rechazado consistentemente la idea de premiar el asalto unilateral de Rusia con concesiones territoriales, señalando que podría sentar un precedente peligroso no visto en Europa desde la apropiación de tierras por Adolf Hitler al comienzo de lo que se convertiría en la Segunda Guerra Mundial.
A pesar de que Putin no ha mostrado disposición a ceder en su demanda por expandir el territorio ruso, el Sr. Trump afirmó el domingo que Ucrania y Rusia estaban “más cerca que nunca antes” de un acuerdo de paz.
Zelenskyy dijo después de la reunión en Mar-a-Lago que las palabras de Putin deben coincidir con sus acciones. Zelenskyy y el Sr. Trump se reunieron apenas un día después de que Rusia lanzara otro ataque devastador contra la capital ucraniana, Kiev.