A día de hoy, la legislación laboral española no contempla un permiso retribuido específico para cuidar de un familiar en tratamiento paliativo. Crédito de la foto: Nayeem6777/Shutterstock
La Vicepresidenta y Ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha anunciado su intención de reformar el Estatuto de los Trabajadores para otorgar permisos laborales más generosos a los empleados. Durante un desayuno informativo organizado por Europa Press, desveló dos cambios principales: la ampliación del permiso por fallecimiento de un familiar y la creación de un nuevo permiso pagado para el cuidado de parientes en cuidados paliativos.
Normativa actual y propuesta de ampliación
Lo que permite la ley actualmente
En el marco legal vigente, el Estatuto de los Trabajadores otorga a los empleados dos días de permiso retribuido en caso de fallecimiento del cónyuge, pareja de hecho o familiar hasta el segundo grado de consanguinidad o afinidad. Si se requiere desplazamiento, este derecho puede ampliarse dos días adicionales, lo que supone un total de hasta cuatro días en ciertas circunstancias.
Actualmente, no existe una licencia retribuida en la normativa laboral española específicamente destinada al cuidado de un familiar que reciba tratamiento paliativo. Los trabajadores en dichas situaciones deben recurrir a excedencias no pagadas, vacaciones anuales o bajas temporales para asumir sus responsabilidades como cuidadores.
Lo que cambiaría la propuesta
Díaz reveló que la reforma propuesta extendería el permiso por duelo hasta los diez días en determinados casos. La duración precisa dependería del grado de parentesco y de si es necesario viajar. Aún no se ha definido una tabla detallada que especifique el número de días para cada categoría de familiar.
En cuanto al nuevo permiso por cuidados paliativos, el Ministerio de Trabajo está ultimando los criterios. Se prevé que cubra a familiares de primer grado, como progenitores, hijos o cónyuges, si bien los requisitos específicos de elegibilidad siguen en estudio. Los primeros esbozos sugieren que este permiso también podría extenderse hasta los diez días en circunstancias concretas.
Adicionalmente, la propuesta podría permitir a los trabajadores, una vez finalizado el permiso, acceder a una jornada reducida para continuar prestando cuidados a sus seres queridos durante un período más prolongado.
Proceso y reacciones
Itinerario legislativo
Para implementar las nuevas medidas, el Gobierno planea emitir un Real Decreto-Ley que modifique el Estatuto de los Trabajadores. Dicho decreto debería ser posteriormente ratificado por el Parlamento. Díaz confirmó que el texto ya está redactado, aunque conseguir el suficiente apoyo parlamentario podría resultar complicado.
La reforma se anunció antes de la consulta formal con las organizaciones empresariales. Díaz instó a las empresas a acoger la propuesta “con cariño”, subrayando que beneficia tanto a los empleados como a las empresas al mejorar la moral, la lealtad y la productividad.
Reacciones de los agentes sociales
Los sindicatos han acogido mayoritariamente la iniciativa con beneplácito, si bien han solicitado mayor concreción y un compromiso con el diálogo social. UGT ha destacado que la ampliación de los permisos por duelo y cuidado no son meras concesiones sociales, sino también medidas esenciales para la salud mental y la prevención de riesgos laborales.
CCOO ha respaldado igualmente la reforma, señalando que España ha estado a la zaga de otros países europeos en lo que a protección por duelo se refiere. El sindicato añadió que los actuales permisos breves a menudo fuerzan a los empleados a cogerse la baja laboral para sobrellevar la pérdida.
Por el contrario, el presidente de la principal organización patronal, Antonio Garamendi de la CEOE, tildó el anuncio de “ocurrencia” y lamentó la falta de consulta previa. Bromeó afirmando que tal vez necesitase “diez días para recuperarse de los anuncios de la ministra”. Economistas del Ministerio de Economía expresaron un apoyo cauteloso, recalcando que, si bien la propuesta es socialmente valiosa, debe equilibrarse con las realidades a las que se enfrentan los empleadores.
Trascendencia e incertidumbres
De ser aprobada, la reforma supondría un avance significativo en el derecho laboral español, incorporando la compasión y la protección familiar al marco jurídico del empleo. Acercaría a España a los países europeos que ya contemplan períodos más largos de permiso retribuido por duelo y obligaciones de cuidado.
No obstante, varios aspectos clave permanecen sin aclarar:
- El número exacto de días permitidos en función del grado de parentesco y si se considerará el desplazamiento.
- Los criterios de elegibilidad para el nuevo permiso por cuidados paliativos y qué familiares incluirá.
- Si el permiso será totalmente retribuido o parcialmente subvencionado.
- El posible impacto financiero para los empleadores y el sector público.
- La probabilidad de su aprobación parlamentaria, dada la fragmentación política en España.
De momento, el anuncio de Díaz sigue siendo una propuesta de política y no una ley en vigor. A medida que progresen los borradores formales y los debates parlamentarios, el alcance final de la reforma podría evolucionar. Aún así, la iniciativa ha reavivado el debate sobre el equilibrio entre la protección de los trabajadores, las cargas empresariales y la responsabilidad social en el sistema laboral español moderno.
