Mercado vacacional británico fuerte, caída del 5% en el mercado alemán por clima cálido

El mayor operador turístico de Europa, TUI, superó esta semana las expectativas de ingresos y beneficios trimestrales, ya que los viajes de verano demostraron mayor resistencia y las inversiones y reservas anticipadas para la temporada invernal le permitieron mejorar sus perspectivas anuales. TUI elevó su previsión de ganancias el martes tras el fuerte desempeño de sus hoteles y cruceros en los primeros nueve meses del año, que finaliza el 30 de septiembre, lo que impulsó sus acciones.

Al detallar sus resultados del tercer trimestre el miércoles, TUI reportó un beneficio operativo (EBIT) subyacente de 321 millones de euros (375 millones de dólares), un 38% más que el año anterior y por encima de los 269 millones esperados por analistas consultados por LSEG. Los ingresos en todos los segmentos aumentaron un 7%, alcanzando los 6.200 millones de euros, ligeramente por encima de las previsiones. Las acciones del grupo subieron más de un 2% en la apertura del mercado.

Las aerolíneas europeas tuvieron un buen desempeño en el segundo trimestre, ya que la caída en la demanda de viajes fue menos pronunciada de lo temido y pareció afectar poco los resultados. Aunque la temporada estival solía ser clave para los ingresos, parte de esa demanda se traslada ahora a primavera y otoño, con viajeros buscando evitar el calor y las multitudes, además de mejores ofertas.

El CEO de TUI, Sebastian Ebel, destacó que las reservas, especialmente entre clientes británicos, siguen sólidas: *”El tercer trimestre y los primeros nueve meses del 2025 fueron fuertes. Nuestra estrategia está dando resultados”*, afirmó el miércoles, resaltando la diversificación de su oferta en Europa Central y Asia y mayores inversiones en hoteles y cruceros.

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La compañía también mostró optimismo por las reservas invernales, con un notable interés en viajes en temporada media (finales de octubre, noviembre y extendiéndose hasta diciembre). Para aprovechar esta tendencia, TUI está invirtiendo en mejoras, como piscinas climatizadas en destinos como Antalya, las islas griegas o el Algarve, explicó Ebel a periodistas.

No obstante, reconoció dificultades en su negocio aéreo, con debilidades en el mercado alemán y menor demanda hacia EE.UU. En el trimestre anterior, TUI había alertado de un ligero descenso en reservas estivales por la inflación y la incertidumbre económica. Aunque los conflictos en Oriente Medio redujeron un 2% las reservas, los precios subieron un 3%, compensando costes más altos.

Los viajeros europeos, principal clientela de TUI, suelen ser más sensibles a los precios que los norteamericanos. Las reservas alemanas cayeron un 5% por el calor, pero Ebel espera una recuperación en otoño.

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