Al menos 21 personas han muerto en un ataque aéreo ruso contra un pueblo del este de Ucrania, según dicen funcionarios locales ucranianos.
El presidente Volodymyr Zelensky dijo que las víctimas eran personas normales que estaban recogiendo sus pensiones en el asentamiento de Yarova, en Donetsk. El líder regional de Donetsk, Vadym Filashkin, indicó que los servicios de emergencia estaban en el lugar y que había tantos heridos como fallecidos.
Yarova está al norte de Sloviansk, una de las grandes ciudades de la región, y no lejos del frente mientras las fuerzas rusas avanzan lentamente en el este.
De confirmarse, el número de muertos sería uno de los ataques más graves contra civiles ucranianos en las últimas semanas, a 42 meses de la invasión a gran escala de Rusia.
Al menos 23 personas fallecieron en ataques aéreos nocturnos sobre la capital de Ucrania, Kyiv, a finales de agosto.
El fin de semana, Rusia lanzó su mayor asalto aéreo de la guerra sobre Kyiv hasta ahora, golpeando el edificio principal del gobierno en la capital, en lo que Zelensky calificó como un ataque “despiadado” destinado a prolongar la guerra.
Al publicar imágenes gráficas del ataque a Yarova en línea, Zelensky dijo que “no hay palabras” para describir los últimos bombardeos rusos. No hubo una respuesta inmediata por parte del ejército ruso.
Vadym Filashkin dijo que el ataque ocurrió a las 12:30 hora local del martes, justo cuando se repartían las pensiones. Publicó una imagen de la escena que parecía mostrar un vehículo del servicio postal ucraniano gravemente dañado, del tipo que se usa para distribuir las pensiones.
Yarova se encuentra en una línea ferroviaria clave en Donetsk, entre Lyman e Izium. También está a solo unos 6 km (3.7 millas) del próximo pueblo de Novoselivka, donde las fuerzas rusas se acercan a las afueras.
El servicio de emergencia estatal de Ucrania informó que otras tres personas habían muerto en bombardeos rusos anteriores en asentamientos de Donetsk.
“El mundo no debe permanecer en silencio,” dijo Zelensky, pidiendo una respuesta tanto de Estados Unidos, Europa como del grupo de naciones del G20.