Francia se enfrenta a un día de caos total este miércoles, ya que un movimiento de base para “bloquearlo todo” amenaza con paralizar las redes de transporte del país.
Las protestas, llamadas “Bloquons tout” (Bloqueemos todo), son parte de una huelga nacional contra el plan de austeridad propuesto por el ya ex-primer ministro François Bayrou. Esta acción continuará incluso después de que su frágil gobierno minoritario cayera esta semana.
El movimiento para “bloquear todo” comenzó en internet desde julio. En las últimas semanas, se propagó rapidamente por TikTok, Telegram y otras plataformas con llamados virales a boicots, bloqueos y huelgas.
Sus inicios populares han generado comparaciones con las protestas de los Chalecos Amarillos en 2018, que nacieron de la ira por los precios del combustible y se convirtieron en una acción nacional contra las élites políticas.
En el centro del descontento esta vez está el plan financiero 2026 de Bayrou, que buscaba recortar 44 mil millones de euros del presupuesto nacional para reducir el déficit de Francia. Las medidas claves incluían eliminar dos días festivos, congelar las pensiones y recortar 5 mil millones en gasto sanitario.
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La protesta llega en medio de una creciente agitación política. El plan de reducción de deuda de Bayrou generó una indignación generalizada y lo llevó a anunciar su renuncia el lunes.
Su gobierno duró solo nueve meses, convirtiéndolo en el tercer primer ministro de Francia en renunciar en el último año.
### Qué pueden esperar los viajeros durante las huelgas en Francia
Se espera que el sector del transporte de Francia sea el más afectado por las protestas.
Sud-Rail ha prometido una “huelga masiva” que podría causar miles de cancelaciones de trenes de la SNCF en todo el país. También se prevén horarios reducidos en los servicios regionales RER y Transilien alrededor de París.
La aplicación Bonjour RATP, operada por el sistema de transporte público de París, pronostica graves alteraciones en varias líneas de cercanías, aunque por ahora se espera que el servicio de metro sea “casi normal”.
Aunque los sindicatos del país no iniciaron la campaña, su reciente apoyo le ha dado más fuerza. El poderoso sindicato CGT ha respaldado la acción, aumentando la posibilidad de interrupciones en trenes, ferris, suministro de combustible y otros servicios.
Eurostar, el servicio de alta velocidad que conecta Londres con París, Bruselas y Ámsterdam, dice que sus trenes funcionarán con normalidad. Pero con los servicios ferroviarios domésticos gravemente afectados, es probable que haya efectos secundarios. Los viajeros podrían enfrentarse a conexiones perdidas, opciones limitadas y rutas alternativas abarrotadas.
### Se avecinan huelgas de controladores aéreos
Aún más disruptiones en el transporte esperan a los viajeros en Francia este mes. El principal sindicato de controladores aéreos de Francia ha confirmado una huelga de 24 horas del 18 al 19 de septiembre.
Se espera que sea una de las mayores huelgas de control aéreo en años, afectando no solo a los vuelos desde y hacia Francia, sino también a miles que cruzan su espacio aéreo. Es probable que las rutas entre el Reino Unido, España, Italia y otros destinos europeos sufran retrasos y cancelaciones.
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Estas interrupciones siguen a una ola de huelgas en julio que cancelaron cientos de vuelos, dejando a pasajeros varados durante la temporada alta de viajes y provocando la ira de las aerolíneas. Al caer la huelga de septiembre fuera de las vacaciones, las aerolíneas advierten que tienen flexibilidad limitada para reprogramar viajes rápidamente.
Según la legislación de la UE sobre derechos del pasajero, todo aquel cuyo vuelo sea cancelado tiene derecho a ser reubicado en el primer servicio disponible (incluso con otras aerolíneas), así como a alojamiento y comidas si queda varado. Sin embargo, normalmente no se ofrece compensación económica por huelgas de control aéreo.
Con la crisis política en París, las protestas en todo el país y las huelgas en los aeropuertos ocurriendo al mismo tiempo, septiembre se perfila como un mes difícil para cualquiera que viaje dentro o a través de Francia.
Se aconseja a los pasajeros que planifiquen con antelación, estén atentos a las actualizaciones de los operadores y se preparen para cambios de último minuto.