MALLORCA consolidó su posición en la cúspide del mapa turístico de España este pasado agosto.
Contrariamente a lo que algunos medios internacionales han difundido, los establecimientos hoteleros de la isla registran los mejores resultados del país. Según los datos publicados esta semana por el Instituto Nacional de Estadística (INE), los visitantes ocuparon las plazas hoteleras con unas de las tasas más elevadas a nivel nacional, y los precios también experimentaron un incremento, lo que refleja una demanda sostenida y robusta.
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Destaca el área de Palma-Calvià
La zona de Palma-Calvià destacó especialmente, alcanzando una ocupación media superior al 92 por ciento, la más alta de España. A pesar de la preocupación manifestada por algunos grupos hoteleros en destinos como Magaluf ante una posible caída, la región en su conjunto registró una ocupación casi completa durante las semanas punta, tanto entre semana como durante los fines de semana.
Resultados globales de Baleares
En el conjunto de las Islas Baleares, algo más de dos millones de turistas pernoctaron en hoteles durante el mes, registrándose aproximadamente 11,3 millones de pernoctaciones. Mallorca, por sí sola, concentró más de 8,5 millones de esas noches, subrayando su peso como el principal motor turístico del archipiélago.
Atractivo internacional
Las Baleares también mantuvieron su liderazgo en cuanto a atractivo internacional, captando un 34 por ciento del total de visitantes extranjeros que llegaron a España. Los precios aumentaron con mayor rapidez que en otras zonas, elevándose la tarifa hotelera media hasta los 211 euros, en comparación con la media nacional de 156 euros.
La demanda se mantiene firme
Si bien el crecimiento interanual fué modesto, la conclusión es evidente: Mallorca y las Baleares continúan siendo el destino vacacional más codiciado de España, aunando una alta ocupación con unos ingresos sólidos.