A finales de octubre, con temperaturas que rondan los veintitantos grados, Mallorca parece estar disfrutando de un magnífico cierre de temporada alta, augurándose además un invierno con fuertes reservas, especialmente las procedentes del mercado británico. Y, según el último informe de Ferryhopper, “Mallorca se impone a Grecia e Italia y se alza con el segundo mejor destino de sol invernal en el Mediterráneo”.
Una nueva investigación revela que un destino español está superando a sus rivales tradicionales de sol invernal. Mallorca ha secureado la codiciada segunda posición en el top 10 de destinos mediterráneos para disfrutar del sol en invierno.
El equipo de investigación de la plataforma de reservas de ferry Ferryhopper analizó destinos en toda Europa, examinando la temperatura media, las horas de luz solar, las precipitaciones y los costes de alojamiento para determinar los mejores escapes invernales.
Hallazgos clave:
• Mallorca ofrece una temperatura de 10,37 °C y casi 10 horas de sol diarias, acompañadas de escasas precipitaciones y el encanto pintoresco de su costa. Se puede explorar las catedrales góticas de Palma, excursionar por los acantilados de Dragonera y relajarse en pueblos bañados por el sol, todo ello por un precio medio de hotel de 154 € por noche.
• El turismo invernal podría ayudar a diversificar la economía estacional de España, especialmente en regiones como las Baleares, dominadas por los picos estivales. El sólido desempeño de Mallorca en temporada baja señala el potencial para extender los empleos en el sector de la hostelería, reducir la migración temporal y estabilizar las fuentes de ingresos locales.
Top 10 de destinos de sol invernal:
1. Malta
2. Mallorca
3. Cerdeña, Italia
4. Kuşadası, Turquía
5. Split, Croacia
6. Piran, Eslovenia
7. Vlorë, Albania
8. Mykonos
9. Santorini
10. Bar, Montenegro
Los expertos en viajes de Ferryhopper comentaron: “El turismo de sol invernal le brinda a España la oportunidad de construir un calendario turístico más equilibrado y depender menos de la temporada alta estival. España posee una amplia gama de destinos culturales e inviernos costeros suaves, por lo que lugares como Mallorca pueden atraer a visitantes que desean disfrutar del clima y de la vida local sin las aglomeraciones del verano. Esto ayuda a distribuir el turismo de manera más uniforme a lo largo del año y a sostener a los negocios locales durante los meses más tranquilos.
“Mallorca ya está percibiendo indicios de este cambio, con un interés creciente en los viajes fuera de temporada y eventos como la floración de los almendros, que atraen a visitantes durante el invierno. Los empresarios españoles pueden promover productos gastronómicos de temporada, rutas de senderismo y sitios históricos que se disfrutan mejor cuando la isla está tranquila y soleada, creando así un modelo anual que beneficia tanto a los viajeros como a la economía local.”