Un superyate que se hundió cerca de la costa de la isla italiana de Sicilia el año pasado ha sido levantado del fondoo marino por un equipo especializado en rescate.
Siete de las 22 personas a bordo murieron en el accidente, incluyendo el dueño del barco, el magnate británico de tecnología Mike Lynch, y su hija de 18 años.
El barco se hundió durante un clima extremo en agosto, pero expertos navales dicen que el Bayesian debería haber resistido la tormenta y no hundirse tan rápido como lo hizo.
En mayo, un buzo murió durante una operación preliminar para recuperar el superyate Bayesian.
Según medios italianos, el buzo era de nacionalidad holandesa y trabajaba para una empresa especializada en salvamento.