Khanyisile Ngcobo, reporting for BBC News from Johannesburg, highlights Ulrich Janse van Vuuren’s dedication to showcasing the beauty of South Africa to his social media followers. The 38-year-old white South African captures stunning scenes such as cold Johannesburg mornings, purple Jacaranda trees in Pretoria, and Cape Town’s beachfronts.
Van Vuuren proudly states that promoting South Africa is his passion and he has no intention of accepting US President Donald Trump’s offer, as South Africa is his home. Despite claims of persecution against white Afrikaners, he remains committed to contributing to his country’s success and is determined to make a meaningful impact.
Van Vuuren emphasizes that those leaving South Africa for the US are not refugees but rather “opportunists” who have enjoyed privileges in the country. He acknowledges the challenges faced by some white farmers but believes it is essential to approach discussions of persecution and discrimination with caution.
While some white South Africans share Van Vuuren’s perspective, others, like Ilse Steenkamp, feel they are part of a persecuted minority. Steenkamp, a former commercial farmer, applied for the refugee program after losing her land to invaders, highlighting the complex issues surrounding land ownership and economic inequality in the country. Khanyisile Ngcobo
A pesar de los esfuerzos por lograr que fueran removidos a través de los tribunales, la Sra. Steenkamp dijo que se vieron obligados a abandonar la tierra ya que fue embargada por el banco.
La Sra. Steenkamp dijo que, aunque ella y su familia estaban familiarizados con los altos niveles de crimen en Sudáfrica y a menudo intentaban “no dejarse vencer”, este último ataque “fue la gota que colmó el vaso”.
A pesar de que su familia estaba ansiosa por aceptar la oferta de Trump cuando fue anunciada por primera vez, la madre de tres hijos le dijo a la BBC que la decisión de irse “fue muy difícil porque estás… dejando todo un modo de vida”.
Al preguntarle si era injusto que los afrikáneres estuvieran siendo otorgados estatus de refugiado en un momento en que Estados Unidos estaba endureciendo su postura con los refugiados y solicitantes de asilo de todo el mundo, la Sra. Steenkamp dijo que “estaba completamente en desacuerdo”.
Se refirió a los ataques a los agricultores, diciendo que había un “odio que parece acompañar a estos ataques”.
“Cualquier agricultor que haya pasado por ese tipo de ataque y ahora quiera huir, creo que debería ser tratado como un refugiado porque están huyendo de un gobierno que ni siquiera admite que estas cosas están sucediendo”, dijo.
EPA-EFE/REX/Shutterstock
Los afrikáneres representan aproximadamente la mitad de la comunidad blanca de Sudáfrica
Sam Busà, de 60 años, es otra sudafricana blanca que ha solicitado el programa de refugiados.
Ella es la fundadora de Amerikaners, una plataforma destinada a proporcionar información a sudafricanos blancos interesados en la oferta de reasentamiento en los EE. UU.
Si bien la Sra. Busà, de ascendencia inglesa y no afrikáner, y sus tres hijos han presentado sus solicitudes, todavía no han sido entrevistados.
Si bien inicialmente se creía que la orden ejecutiva, vaga en su redacción original, solo se aplicaba a los afrikáneres blancos, la Sra. Busà dijo que “claramente está apuntando a los sudafricanos blancos”.
El lunes, la embajada de EE. UU. en Sudáfrica emitió un comunicado aclarando los criterios para aquellos que solicitan el reasentamiento, que decía que los solicitantes deben ser:
De nacionalidad sudafricanaAfrikáner o de una minoría racialCapaz de citar un incidente de persecución pasada o temor a persecución en el futuro
En respuesta a las críticas de que no eran refugiados genuinos, la Sra. Busà dijo: “Cuando alguien te quita la esperanza para el futuro, aunque no estés en una zona de guerra… alguien que te quita tus sueños y esperanzas para el futuro, eso es muy dramático. Es una angustia mental y un abuso emocional en cierto sentido.”
Pero el Dr. Piet Croucamp, profesor asociado de estudios políticos en la Universidad del Noroeste de Sudáfrica, estuvo en desacuerdo, repitiendo la opinión de que aquellos que aceptan esta oferta no son refugiados ya que “Sudáfrica no persigue a la gente”.
En cambio, especuló que podrían ser aquellos que han sido víctimas de un crimen y “podrían definir su existencia como insegura”.
El Dr. Croucamp, que es afrikáner, dijo que aunque no esperaba que un número significativo de sudafricanos blancos siguieran el ejemplo, siempre habría personas “oportunistas” que se aprovecharían de la situación.
“Este es un pequeño grupo de personas que se va – la gran mayoría de los afrikáneres no van a ninguna parte y lo han expresado. Incluso los afrikáneres de derecha… [como] AfriForum y Solidaridad han dicho que no van a ninguna parte. Así que incluso dentro de los círculos afrikáneres, este es un pequeño grupo de personas”, dijo.
A pesar de sus críticas al gobierno y sus políticas basadas en la raza, los prominentes grupos de presión afrikáneres AfriForum y el Movimiento de Solidaridad han reiterado su intención de permanecer en Sudáfrica.
AfriForum dijo que si bien el gobierno era culpable de la salida del grupo al que se le otorgó estatus de refugiado, ellos se quedarían y continuarían sus “esfuerzos para ayudar a crear un futuro para los afrikáneres aquí, en el extremo sur de África”.
Esta es una opinión con la que está de acuerdo el Sr. Janse van Vuuren.
“Si bien algunos pueden elegir irse como refugiados, la mayoría de nosotros estamos aquí para quedarnos, trabajando juntos para construir un futuro mejor para todos en Sudáfrica.”
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Imágenes de Getty/BBC” “Khanyisile Ngcobo is her name”