El offseason de Paul Sewald empezó con un recordatorio de lo rápido que cambia el mercado de relevistas: un año eres un arma en los playoffs, al siguiente buscas un nuevo hogar cuando un equipo rechaza tu opción.
Los Tigers no tomaron su opción de 10 millones, una decisión más por dinero que por falta de confianza, pero deja a Sewald en un lugar conocido: el relevista veterano que debe ganarse su puesto otra vez.
Su temporada 2025 fue irregular para sus estándares. Hubo momentos en que su fastball y slider funcionaban, y otros donde el control fallaba, lo que causó más daño al final del año de lo normal.
Con pocos brazos derechos confiables en el mercado, él es un candidato clásico para un contrato de un año con incentivos. Tres equipos encajan naturalmente con lo que ofrece ahora.
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Los Mets ya no pueden apostar por lanzadores sin experiencia en las últimas entradas. Sewald les da algo que les ha faltado: un veterano que puede lanzar en la séptima, octava o novena entrada sin que el momento lo supere.
Su historial en situaciones de alta presión lo hace atractivo para un equipo que quiere estabilizar el camino a Edwin Díaz.
El tamaño de Citi Field ayudaría a reducir el riesgo de home runs que tuvo en septiembre, y la costumbre de los Mets de usar roles definidos en la bullpen juega a favor de Sewald. Un contrato de un año con incentivos parece buen para ambos.
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Si hay una organización capaz de arreglar un mal momento sin cambiar la identidad de un lanzador, son los Dodgers.
El plan de Sewald sigue intacto: fastballs altas, slider para hacer batear fuera de zona, y secuencias valientes. El departamento de diseño de lanzamientos de Los Ángeles tiene experiencia en pulir veteranos.
Dodger Stadium también le da un margen de error que no siempre tuvo la temporada pasada. No necesitaría ser el cerrador; sería otra pieza confiable en un bullpen que usa versatilidad y profundidad.
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La bullpen de San Francisco ha carecido de un orden claro por dos temporadas, y la presencia de Sewald daría estructura al grupo inmediatamente.
Su temperamento calma y metódico va bien con Oracle Park, y puede enfrentarse a partes difíciles del lineup sin depender solo de la velocidad. Los Giants valoran relevistas que pueden hacer entradas completas o enfrentamientos específicos, y Sewald ha hecho ambos en postemporadas.
Con una rotación aún inestable, necesitan a alguien que dé entradas confiables de presión mientras los lanzadores jóvenes se desarrollan. Un contrato corto y flexible les daría la estabilidad que buscan desde su última postemporada.