Lonzo Ball es conocido como uno de los mejores organizadores en la NBA. Ahora es el base suplente de los Cleveland Cavaliers, pero al principio de su carrera tenía potencial para ser una estrella. Todo comenzó cuando los LA Lakers lo eligieron en el número 2 del draft en 2017, pero él nunca alcanzó su verdadero potencial con ese equipo.
Ball solo jugó dos temporadas con los Lakers antes de que lo cambiaran a los New Orleans Pelicans. El equipo quería competir por un campeonato después de que LeBron James se unió en 2018. El antiguo jugador de UCLA no fue el único jugador en ser cambiado a los Pelicans.
Brandon Ingram, Josh Hart y tres elecciones de primera ronda fueron parte del cambio. A cambio, los Lakers consiguieron a Anthony Davis y ganaron el campeonato del 2020.
En el episodio del martes del “Ball in the Family Podcast”, el base de los Cavaliers recordó su tiempo en Los Ángeles. Ball pensaba que los Lakers no debieron hacer ese cambio porque el grupo joven del equipo en ese momento mostraba potencial.
“Creo que deberían haber guardado todas esas elecciones del draft y ver cómo iba, pero igual ganaron el anillo, así que funcionó para ellos,” dijo Ball.
Después de su tiempo con los Lakers, Ball jugó dos temporadas para los Pelicans. Tuvo su mejor temporada en la 2020-21. En 55 partidos, promedió 14.6 puntos, 4.8 rebotes y 5.7 asistencias. Luego, se unió a los Chicago Bulls, pero solo jugó una temporada. Tuvo problemas con lesiones durante sus últimos dos años en Chicago.
Ingram ganó el premio al Jugador Más Mejorado en su primera temporada con los Pelicans. También fue nombrado All-Star. Después de seis años, el ala pívot de Duke ahora está con los Toronto Raptors. Hart, mientras tanto, jugó para varios equipos como un jugador importante de rotación. Ahora es una pieza clave para los New York Knicks.
¿Cómo ha impactado Lonzo Ball a los Cavaliers esta temporada?
Debido a lesiones, Lonzo Ball tiene un papel más secundario con los Cavaliers. Como suplente de Darius Garland, Ball ha sido un contribuyente confiable para el equipo. En 15 partidos, promedia 6.1 puntos, 4.3 rebotes y 5.2 asistencias por partido.
Ball solo ha convertido el 30.6% de sus tiros de campo, lo que indica un pobre porcentaje de tiro. Incluso desde más allá de la línea de tres puntos, el base de 1.98 metros tiene su peor porcentaje de carrera con 28.4%.
A pesar de sus problemas para anotar, él ha dado estabilidad a los Cavaliers. Cuando Garland está en el banquillo, el equipo se siente cómodo con Lonzo Ball tomando el liderazgo.