Paul Kirby
Editor digital, Europa
Marharyta Fal/Frontliner/Getty Images
El borrador del plan de paz entre Estados Unidos y Rusia ha sido filtrado ampliamente y ahora sabemos que propone entregar esas áreas de la región industrial de Donbas, en el este de Ucrania, que aún están bajo control ucraniano, al control de facto de la Rusia de Vladimir Putin.
Las últimas versiones del texto también piden que Ucrania reduzca el tamaño de sus fuerzas armadas a 600,000 personas.
Pero, ¿qué más se sabe sobre el texto y quién saldría más beneficiado?
¿Cuáles son los puntos clave?
Hay 28 puntos clave y hay varios que, en principio, podrían ser aceptables para Ucrania. Otros parecen vagos e imprecisos.
La soberanía de Ucrania sería "confirmada" y habría un "acuerdo completo y total de no agresión entre Rusia, Ucrania y Europa", con "garantías de seguridad" robustas o confiables para Kyiv y una demanda de elecciones sorpresa en 100 días.
Si Rusia invadiera Ucrania, se propone una "respuesta militar coordinada y robusta", junto con la restauración de sanciones y la anulación del acuerdo.
Aunque las elecciones son imposibles en Ucrania debido a la ley marcial, en teoría podrían realizarse si se firma un acuerdo de paz.
Pero sobre las garantías de seguridad, no hay detalles sobre quién las proporcionaría y cuán robustas podrían ser. Esto queda muy lejos de un compromiso al estilo del Artículo Cinco de la OTAN, que trataría un ataque a Ucrania como un ataque a todos. Kyiv querría más que una promesa vaga si fuera a aceptarlo.
Entrega de territorio ucraniano y reducción de las fuerzas armadas
Entre las propuestas más controvertidas están que Ucrania entregue su propio territorio no ocupado y reduzca el tamaño de sus fuerzas armadas.
"Las fuerzas ucranianas se retirarán de la parte del Óblast de Donetsk que actualmente controlan, y esta zona de retirada será considerada una zona de amortiguamiento neutral y desmilitarizada, reconocida internacionalmente como territorio perteneciente a la Federación Rusa. Las fuerzas rusas no entrarán en esta zona desmilitarizada."
Ceder territorio donde vive al menos un cuarto de millón de ucranianos -las ciudades del "cinturón fortaleza" de Donetsk: Sloviansk, Kramatorsk y Druzhkivka- no será aceptable para la mayoría de los ucranianos. Rusia ha pasado más de un año intentando capturar la ciudad de Pokrovsk; es poco probable que Ucrania entregue esos centros estratégicos tan importantes sin luchar.
"El tamaño de las Fuerzas Armadas de Ucrania se limitará a 600,000 efectivos."
Se estimaba que el ejército ucraniano en enero pasado tenía 880,000 efectivos activos, un aumento respecto a los 250,000 al comienzo de la invasión a gran escala en febrero de 2022.
Aunque 600,000 podría parecer un número potencialmente aceptable en tiempos de paz, ese tipo de limitación infringiría la soberanía ucraniana. También podría ser un número demasiado grande para que Rusia lo acepte.
"Nuestras líneas rojas son claras e inquebrantables", dijo la representante ucraniana Khrystyna Hayovyshyn al Consejo de Seguridad de la ONU: "Nunca habrá ningún reconocimiento, formal o de otro tipo, del territorio ucraniano temporalmente ocupado por la Federación Rusa como ruso. Ucrania no aceptará ningún límite a sus derechos de autodefensa o al tamaño o capacidades de nuestras fuerzas armadas."
El borrador también propone que "Crimea, Luhansk y Donetsk serán reconocidas como de facto rusas, incluso por Estados Unidos".
En otras palabras, Ucrania y otros países no necesitarían reconocer el control ruso por ley. Eso podría permitir a Kyiv aceptar dicha formulación, ya que no infringiría la constitución de Ucrania que dice que sus fronteras son "indivisibles e inviolables".
En otros lugares, en las regiones del sur de Kherson y Zaporizhzhia, las líneas del frente se congelarían y Rusia renunciaría a las áreas que ha ocupado en otras zonas.
El futuro de Ucrania: con la UE pero no con la OTAN
El borrador propone compromisos significativos sobre el futuro estratégico de Ucrania:
"Ucrania acepta consagrar en su constitución que no se unirá a la OTAN y la OTAN acepta incluir en sus estatutos una disposición que establezca que Ucrania no será admitida en el futuro."
"Ucrania es elegible para la membresía de la UE y obtendrá acceso preferencial a corto plazo al mercado europeo mientras se evalúa este tema."
Hay pocas posibilidades de que Ucrania se una a la OTAN en el corto plazo y Rusia ha suavizado recientemente su postura sobre la candidatura de Ucrania a la membresía de la UE. El documento parece ofrecer a Kyiv acceso a los mercados de la UE ignorando las opiniones de los 27 países europeos.
Tanto unirse a la UE como a la OTAN son parte de la constitución de Ucrania, y otra de las líneas rojas de Khrystyna Hayovyshyn en la ONU el jueves fue: "Tampoco toleraremos ninguna infracción de nuestra soberanía, incluido nuestro derecho soberano a elegir las alianzas a las que queremos unirnos."
Otras propuestas del borrador son que la OTAN acepte no estacionar tropas en Ucrania y que los aviones de combate europeos se estacionen en Polonia. Kyiv también tendría que comprometerse a ser un "estado no nuclear".
Eso parece rechazar los planes de la Coalición de los Dispuestos de Occidente, liderada por el Reino Unido y Francia, para ayudar a vigilar cualquier acuerdo futuro.
Sacar a Rusia del aislamiento
Varios puntos se refieren a sacar a Rusia del aislamiento, con "Rusia para ser reintegrada en la economía global" e invitada de nuevo al grupo de potencias del G8.
Eso parece muy lejano por ahora, con Putin bajo una orden de arresto de la Corte Penal Internacional. Rusia fue expulsada del G7 después de que se apoderara y luego anexara Crimea en 2014, y Trump intentó traer a Putin de vuelta al grupo seis años después.
Si el Reino Unido, Canadá, Francia, Alemania, Italia y Japón eran reacios antes de la invasión a gran escala, ahora hay aún menos posibilidades de que eso suceda.
¿Qué pasa con los activos congelados de Rusia?
El borrador propone que 100,000 millones de dólares de activos rusos congelados se inviertan "en los esfuerzos liderados por Estados Unidos para reconstruir e invertir en Ucrania", recibiendo Estados Unidos el 50% de las ganancias y Europa agregando 100,000 millones de dólares en inversión para la reconstrucción.
Esto recuerda al acuerdo de minerales de Estados Unidos con Ucrania a principios de este año, extrayendo un precio estadounidense por su participación, y también deja a la Unión Europea con nada más que facturas cuantiosas.
Las sumas que menciona pueden no ser suficientes tampoco: a principios de este año, el coste total de la reconstrucción en Ucrania se estimó en 524,000 millones de dólares (506,000 millones de euros).
Alrededor de 200,000 millones de euros en activos rusos congelados están en su mayoría en poder de Euroclear en Bélgica, y la Unión Europea está trabajando actualmente en un plan para usar ese dinero para financiar a Kyiv financiera y militarmente.
El resto de esos activos congelados irían a un "vehículo de inversión estadounidense-ruso", según el borrador, por lo que Rusia recuperaría parte de su dinero, pero nuevamente habría un beneficio financiero para Estados Unidos.
¿Qué no está en el plan?
Varios comentaristas han señalado que el plan no requiere limitaciones de armas para el ejército ucraniano o su industria armamentística, a pesar de que hay una disposición que dice: Si Ucrania dispara un misil contra Moscú o San Petersburgo, la garantía de seguridad se considerará nula e inválida.
Pero no impone ninguna restricción a las armas de largo alcance que Ucrania ha estado desarrollando, como sus misiles Flamingo y Long Neptune.
¿Es este un plan de paz definitivo?
Sabemos que Estados Unidos está interesado en avanzar rápidamente con este borrador bajo una "agresiva línea de tiempo", con informes que sugieren que Ucrania tiene hasta el Día de Acción de Gracias de la próxima semana para aceptarlo.
Igualmente, el Secretario de Estado estadounidense Marco Rubio, que participó en su redacción, lo describió como "una lista de ideas potenciales para terminar esta guerra", y el ministro de Asuntos Exteriores alemán Johann Wadephul ha dejado claro que no ve los 28 puntos como un plan definitivo, después de hablar con el otro funcionario estadounidense clave involucrado, el enviado de Trump Steve Witkoff.
En algunos aspectos, el documento borrador parece un trabajo en progreso, con algunos detalles que fueron filtrados a sitios web estadounidenses el jueves ya no aparentes.
La Unión Europea dijo el viernes por la mañana que aún no había visto oficialmente el plan, y el ministerio de Asuntos Exteriores ruso dijo lo mismo.
¿Es el borrador una lista de deseos de Putin?
Se sabe que el enviado especial ruso Kirill Dmitriev pasó hasta tres días con Witkoff discutiendo este plan, lo que generó sugerencias de un acuerdo amañado para favorecer a Moscú. Pero la respuesta de Rusia ha sido cautelosa hasta ahora y dice que ni siquiera ha visto el plan.
La entrega de territorio ucraniano a Rusia, incluso en una zona desmilitarizada, es la mayor señal de una inclinación hacia la narrativa rusa, pero congelar las líneas del frente en el sur podría resultar difícil para el Kremlin, que ha anexado tanto Kherson como Zaporizhzhia en su constitución.
Una de las propuestas es que el levantamiento de sanciones sea "acordado por etapas y caso por caso", lo que Moscú probablemente verá como demasiado lento.
Sin embargo, un plan para una "amnistía completa" para todas las partes será bien recibido en Moscú y muy mal en Kyiv y en las capitales europeas.
Los comentaristas han señalado que, aunque parecen haber importantes concesiones a Putin, algunos de los requisitos para la OTAN podrían ser demasiado vagos para el gusto del Kremlin.
Rusia también ha exigido consistentemente que un plan de paz necesitaría eliminar lo que ve como "las causas profundas" de la guerra. Una de esas causas profundas es detener la expansión de la OTAN en Europa del Este, algo que el borrador parece tratar.
Algunos de los otros 28 puntos del borrador también asienten a las afirmaciones de Rusia sobre la discriminación de la población de habla rusa en Ucrania sin respaldarlas explícitamente.
Un punto es explícito pero ecuánime: "Ambos países acordarán abolir todas las medidas discriminatorias y garantizar los derechos de los medios de comunicación y la educación ucranianos y rusos."
Otro aparente intento de ser imparcial proviene de una propuesta para distribuir la electricidad generada por la central nuclear de Zaporizhzhia, ocupada por los rusos -la más grande de Europa- "en partes iguales entre Rusia y Ucrania".