Ibiza se encuentra sumida en el caos después de que las intensas lluvias registradas desde primeras horas del martes provocaran que la alerta meteorológica se elevara de naranja a roja por riesgo extremo de tormentas torrenciales. El acceso a la ciudad de Ibiza ha quedado completamente cortado, tanto desde Santa Eulària como desde Sant Antoni.
El núcleo urbano está colapsado, con calles y barrios anegados. En la Avenida Santa Eulària, resultaba en momentos imposible distinguir la calzada del mar, lo que generó situaciones de grave peligro, incluyendo vehículos a punto de ser arrastrados por las aguas. Los ferris procedentes de Formentera no han podido atracar. En otras zonas claves, como el Vuit d’Agost y la glorieta conocida localmente como “la de los Podencos”, se han quedado coches varados en las aceras debido a las severas inundaciones.
Numerosos conductores han sido sorprendidos por los súbitos aguaceros, habiéndose requerido la intervención de servicios de emergencia para rescatar a varios de ellos. Un conductor quedó atrapado en el túnel de Es Puig d’en Valls, completamente anegado, y el túnel del aeropuerto también permanece cerrado. Los Bomberos de Ibiza han realizado alrededor de quince rescates, mientras que empresas como Grúas Ibiza han prestado asistencia en carretera en aproximadamente un centenar de ocasiones.
El sargento José Antonio López, de los Bomberos de Ibiza, declaró a IB3 Televisión que los efectivos han atendido aproximadamente cincuenta incidencias relacionadas con las inundaciones en la isla.
Se insta a las familias a que no acudan a los colegios o institutos a recoger a sus hijos, ya que las autoridades recomiendan evitar cualquier desplazamiento que no sea esencial.
El Comité de Emergencias del Govern se reúne en estos momentos para evaluar la situación y decidir las medidas a adoptar.
