Michael Douglas ha sido visto nuevamente este verano por las calles de Menorca, luciendo como un auténtico lugareño. Tampoco quiso perderse las fiestas de Sant Joan. Con los años, ha demostrado su pasión por las calas, pueblos y, claro está, la gastronomía de la isla.
El lunes, hizo una parada para comer en el restaurante Mesón Can Jaume en Es Mercadal, acompañado de su hija Carys Douglas, hija de Catherine Zeta-Jones, y un amigo que, según se comenta, es cliente habitual del lugar.
La leyenda de Hollywood, que posee una propiedad en Valldemossa desde hace más de 30 años, posó para una foto junto al maître Carlos y Jaume, uno de los hermanos Riudavets, dueños del grupo Molí des Racó. Como era de esperar, este restaurante está especializado en cocina típica menorquina, carnes de la isla y productos locales. Pertenece al grupo Molí des Racó.
El verano pasado, Douglas disfrutó de un crucero desde Mallorca hasta Menorca y se espera que regrese a Mallorca tras las festividades menorquinas. Ganador de dos Óscars y cinco Globos de Oro, este productor cinematográfico también es un apasionado del Mar Balear. Desde su lujosa finca S’Estaca en Mallorca, pasa cada vez más tiempo en las islas cuando sus compromisos profesionales se lo permiten. El verano pasado afirmó que le encantaría pasar hasta seis meses al año en su propiedad mallorquina.
El actor declaró a los medios: *”Quiero deshacerme del equipaje extra que he acumulado con los años y disfrutar de mi tiempo libre aquí. Voy a estar en Mallorca seis o siete meses. No es un retiro formal, pero estoy semijubilado”*. Tal es su vínculo con las Baleares que en 2003 fue nombrado embajador cultural de Mallorca.