SAO PAULO – Según una investigación realizada por expertos en salud de Brasil, la actividad solar que afecta al campo geomagnético de la Tierra podría aumentar el riesgo de ataques al corazón, especialmente entre las mujeres.
El estudio, publicado en la revista Communications Medicine, analizó ingresos hospitalarios entre 1998 y 2005 y descubrió que hubo un número significativamente mayor de infartos en comparación con períodos de menor actividad solar.
Las tormentas solares ocurren después de erupciones en el Sol que provocan eyecciones de masa coronal y fulguraciones solares.
Estos eventos envían partículas de alta energía y radiación electromagnética hacia la Tierra, lo que puede afectar equipos de comunicación y causar auroras boreales. Sin embargo, se entiende poco cómo afectan a la salud humana.
Advertencia de Conducción en Otoño: Las Hojas Mojadas Pueden Ser Tan Resbaladizas Como el Hielo
“Es importante destacar que los resultados presentados en este estudio no son concluyentes y, por lo tanto, la intención no es alarmar a la población, particularmente entre las mujeres”, declararon los autores del estudio. “Más bien, estos hallazgos representan un resultado empírico de significado hipotético que no debe ser ignorado en ningún contexto técnico-científico.”
El equipo de investigación comparó los ingresos hospitalarios con los valores del índice Kp planetario, que mide la actividad geomagnética.
El índice varía de 0 a 9 e indica los niveles de perturbación del campo magnético terrestre.
Generalmente, los hombres fueron ingresados por infartos casi el doble que las mujeres, pero durante los días con valores altos del índice Kp, esa brecha se redujo significativamente.
Aunque los hombres aún representaban más casos, las tasas de las mujeres aumentaron de forma desproporcionada. Esto llevó a los investigadores a plantear la hipótesis de que los ritmos biológicos y las funciones cardiovasculares fueron alterados por el evento espacial.
Las mujeres, especialmente aquellas mayores de 30 años, mostraron los mayores cambios durante la presencia de estas condiciones geomagnéticas.
El estudio coincidió con el Ciclo Solar 23, que comenzó en 1996 y terminó en 2008, según la NASA.
Durante este evento, se observaron varias grandes fulguraciones solares y eyecciones de masa coronal en años como 2000, 2001 y 2003.
Los investigadores no indicaron si examinaron hospitalizaciones durante el Ciclo Solar 19, que duró desde aproximadamente 1954 hasta 1964.
Se considera que ese período fue uno de los ciclos de actividad solar más activos, con aproximadamente 285 manchas solares detectadas en marzo de 1958.
El Sol se encuentra actualmente en lo que se conoce como Ciclo Solar 25, que comenzó en 2019 y alcanzó su pico de actividad en octubre de 2024.
La NASA anticipa que el ciclo terminará alrededor de 2030, cuando la actividad solar disruptiva esté en su mínimo, antes de alcanzar otro pico a mediados o fines de la década de 2030 durante el Ciclo Solar 26.
Perspectiva del Centro de Predicción del Clima Espacial de la NOAA para el Ciclo Solar 25.
Fuente del artículo original: ¿Las tormentas solares conducen a un aumento de visitas al hospital?