El número de personas en España en riesgo de pobreza o exclusión social ha disminuido en la última década, pero persisten graves problemas en torno a la infancia y la vivienda asequible.
Así lo revela el informe anual sobre pobreza publicado este miércoles por EAPN-ES, La Red de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en España.
Según el documento, hay 12.5 millones de personas en riesgo, la cifra más baja desde 2014, pero 4.1 millones viven en pobreza severa, con hogares que tienen ingresos mensuales inferiores a 644€.
La EAPN-ES también ha criticado la tasa "alarmante" de pobreza infantil, que afecta a 2.3 millones de menores, la más alta de la Unión Europea.
El estado de bienestar español evitó que 11.1 millones de personas cayeran en la pobreza en 2024, pero los datos reflejan que al menos un cuarto de la población siguió en riesgo durante la última década.
El informe destaca que el riesgo de pobreza y exclusión social se redujo ligeramente en el último año, pasando del 26.5% al 25.8% de la población.
Carlos Susias, presidente de EAPN-ES, declaró: "Las medidas que han mejorado la situación en general no llegan con precisión a las personas más vulnerables, que son quienes más lo necesitan."
"Esto cronifica su situación y limita las posibilidades de salir de la pobreza", añadió.
De hecho, el número de personas en pobreza severa es un punto porcentual mayor que en 2008. Tres de cada diez personas en hogares con niños están en riesgo de pobreza o exclusión.
En familias monoparentales, más de la mitad (50.3%) están en riesgo, mientras que en hogares numerosos la cifra es del 49.1%.
El acceso a la vivienda es un problema grave: los gastos inmobiliarios consumen un tercio de los ingresos, dejando solo 333€ de media tras pagar el alquiler (370€ para quienes tienen hipoteca).
Susias advirtió: "Hay que analizar lo que ocurre con la vivienda, porque está empobreciendo a familias que, en teoría, no deberían estar en esta situación."
La EAPN-ES exige medidas urgentes contra la pobreza infantil, similares a las aplicadas en Bulgaria, Grecia o Rumanía, donde las tasas han bajado. También reclama a los partidos políticos que aprueben el Pacto de Estado contra la Pobreza en el Congreso.
Dicha medida garantizaría ingresos "dignos" en todas las etapas de la vida —incluyendo una prestación universal por crianza—, además de acceso a vivienda digna, empleo de calidad, educación inclusiva y políticas de cuidados y corresponsabilidad.
