La playa idílica de Mallorca donde sentirás como en TailandiaDisfruta de un paraíso exótico sin salir de la isla.

En Mallorca, existe un rincón natural que rara vez recibe la atención que merece. Sus aguas turquesa y el entorno de bosques de pino y acantilados bajos lo convierten en un lugar único, evocando fácilmente imágenes de destinos tan remotos como Tailandia. Hablamos de Cala Varques, una cala virgen de arena blanca y fina, con una longitud de entre 70 y 100 metros.

Las características naturales de esta cala, donde se pueden explorar diversas cuevas marinas, la hacen un sitio excepcional para espeleólogos, buceadores y amantes del snorkel. Lugares como la Cueva del Pirata, la Cueva del Xot o la Cova des Coloms forman parte del atractivo submarino de Cala Varques, ofreciendo un mosaico de formaciones naturales que recuerdan a algunas de las cuevas más icónicas de las islas tailandesas de Ko Phi Phi.

Acceso y conservación de un entorno salvaje
Uno de los principales valores de esta playa es su preservación en estado natural. No cuenta con servicios: ni duchas, ni bares, ni socorristas, lo que contribuye a mantener un ambiente tranquilo y apartado. El acceso a Cala Varques requiere algo de aventura, ya que hay que caminar por un sendero entre 20 y 60 minutos desde los puntos más cercanos o llegar en barco.

Este factor no es menor. Aunque en verano puede atraer excursionistas y embarcaciones fondeadas, la ausencia de infraestructuras a gran escala protege el paisaje y la experiencia de quienes buscan contacto íntimo con la naturaleza mediterránea. Además, hay zonas nudistas y antiguos puntos para practicar psicobloc o saltos desde acantilados, aunque muchas de estas actividades están reguladas o prohibidas para preservar la seguridad y el medio ambiente.

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Comparación con las playas tailandesas de Ko Phi Phi
Los paralelismos con la costa de Ko Phi Phi en Tailandia son especialmente llamativos. Ambos destinos cuentan con:
Aguas transparentes y turquesa que facilitan la observación marina y atraen a entusiastas del snorkel.
Playas de arena blanca rodeadas de formaciones rocosas, especialmente calcáreas, que moldean acantilados bajos o altos y cuevas naturales.

Entornos relativamente aislados donde el acceso implica cierta dosis de aventura, ya sea caminando o en barco, sin la intervención directa de servicios turísticos masivos. En Tailandia, las islas Phi Phi son famosas por sus paredes de caliza erosionada y cuevas icónicas como la Viking Cave o las cercanas a Maya Bay. Cala Varques tiene una geografía similar, aunque a menor escala, con cuevas como la del Pirata o la Cova des Coloms que fascinan a quienes exploran sus profundidades y alrededores.

Un refugio para quienes buscan tranquilidad
En un mundo donde las playas más visitadas se han convertido en destinos turísticos masificados, Cala Varques aún conserva ese aire de playa salvaje e idílica. La combinación de pinos, acantilados bajos y arena blanca hace que los visitantes sientan que entran en un entorno virgen e inalterado.

Aunque suele tener afluencia en temporada alta, el acceso limitado y la falta de servicios aseguran que no se masifique como otras playas de Mallorca o los icónicos paraísos tailandeses, cuya sobreexplotación turística preocupa a los expertos en conservación.

Esta cala también invita a disfrutar de la observación marina desde la orilla, gracias a la transparencia de sus aguas, atrayendo a espeleólogos aficionados y expertos, así como a buceadores deseosos de explorar cuevas y paredes rocosas sumergidas.